SIEMPRE MARTIN
Según parece, se dice, se comenta … cuando aún no se han
extinguido los ecos de su última aventura, cubrir la
distancia Melilla – Ceuta, o lo que es igual, hermanar las
dos ciudades autónomas a golpe de pala, ya se viene
empleando en otros menesteres que le llevarán a protagonizar
otra gran machada, Y es que el chico, pese a haber cruzado
el ecuador del medio siglo, sigue como en sus mejores
momentos; esos que le llevaron a disputar campeonatos
nacionales, europeos, citas mundiales e innumerables pruebas
de alto rango.
Posee raza este fenomenal deportista, de los mejores
historiales que ha dado nuestra tierra y que en nada se le
ha hecho honor, desaprovechando su dilatada experiencia y
conocimientos. En su humildad, radica su grandeza. En su
constancia, su éxito. Desde siempre dando de lado el
autobombo, dejando la propaganda a otros/as asiduos de
cultivar la envidia, con muchos menos méritos, cualidades
que él. Resulta ser un personaje que perfectamente podría
protagonizar la más interesante de las de novelas pues, su
vida encierra episodios que sorprenderían en este nuestro
pueblo. Buena gente, este Martín.
Ahora, los indicios nos llevan a determinada isla lejana.
Para más datos, según se sale del puerto de Ceuta… todo a la
izquierda. Se ha propuesto pisar tierra tras un mes y medio
de darle a la “máquina”.
Cuenta con un fiel equipo que le proporcionará el apoyo
necesario que requiere empresas de esta envergadura y
dispuesto a acompañarle hasta el fin del mundo. De antemano,
objetivo conseguido.
CONTROLES POLICIALES
Dan miedo, asustan. Se plantan en pleno centro, en la
esquina más recóndita, a la salida de la curva y de repente
te sorprenden dándote el autoritario ¡ alto !.
Uno que incluso ha visitado el país vasco, nunca había
conocido tal cosa. Una actitud de la que nos congratulamos,
de la que estamos agradecidos. Que velen por nuestra
seguridad, que se persiga a los bandidos, a los amigos de lo
ajeno, al bandolero, delincuente, a los que se hacen al
volante sin permiso de conducir, a los que como otros tantos
caballas me cepillaron el coche en cierta ocasión y ya nunca
más volví a verlo, etc, etc. Es bueno. Muy bueno.Ç
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