El teniente general de la Unidad Militar de Emergencia (UME),
José Emilio Roldán, visitó ayer las dependencias policiales
y de bomberos de Ceuta, acompañado por su Estado Mayor y por
el responsable político de Gobernación, Rodríguez Gómez. La
idea, seguir manteniendo un contacto cercano con la ciudad.
La relación de la UME con Ceuta se intensifica. Y es que
entre 2008 y 2009 el contacto entre ambas partes ha sido
frecuente. Y con el roce surge el cariño. Por un lado, este
hecho es positivo, porque quiere decir que se tiene en
cuenta a esta parte del territorio español; pero por otro,
requiere una cierta precaución, ya que se trata de una
unidad de emergencia que sólo actúa salvo casos extremos,
concretamente de alerta 2. De todas manera, gracias a la
dulcificación de las relaciones, en septiembre del año
pasado se firmó un acuerdo técnico por el que se daba la
posibilidad a estos militares de que por motivos de
preparación pudieran realizar alguna operación en esta
autonomía como entrenamiento. Y este acuerdo técnico se va a
llevar a efecto en primavera de 2009 con un simulacro,
posiblemente en mayo, aunque todavía no está cerrado. La
finalidad es que tanto efectivos de la UME como los de
Protección Civil se coordinen de la mejor manera, un
entrenamiento que sirva, Dios no lo quiera, para
intervenciones futuras en las que el tiempo sea decisivo.
Con esta medida pretenden evitar imprevistos como los de
desplazamientos marítimos o áreos hasta Ceuta.
Por lo demás, la visita del teniente general José Emilio
Roldán, que asumió el cargo en verano del año pasado,
consistió en presentarse ante el presidente de la Ciudad, en
reconocer las unidades de Emergencia del 112, Policía Local,
Parque Móvil y Bomberos, en la que estuvo presente el
superintendente jefe, Ángel Gómez, y el consejero de
Gobernación, José Antonio Rodríguez.
Dentro del Polifuncional de la Policía los agentes le
presentaron al general una exposición del Plan de
Emergencias de Ceuta y se le entregó a Roldán una metopa
como recuerdo de la visita.
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