En la Comisión Islámica de Melilla (CIM) y la Asociación
Intercultura están convencidos de que el reciente auto del
juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ratificando la
solicitud de extradición de Mohamed El Bay y Ali Aaras a
Marruecos es una medida que se ha tomado para facilitar las
relaciones entre España y el Reino Alauí. Ambas asociaciones
consideran que la medida quiebra el principio de
universalidad de la Justicia y el de igualdad jurídica.
Para la CIM, en el caso de Mohamed El Bay la Audiencia
Nacional "sencillamente" ha omitido su condición de
ciudadano español, a pesar de que cuenta con su
correspondiente Documento Nacional de Identidad.
En este sentido, el portavoz de la CIM, Abdehrraman Benyhaya,
recordó ayer que el Código Civil es muy claro en lo que
respecta a la retirada de la nacionalidad: se llevará a cabo
cuando ese ciudadano haya hecho solo y exclusivamente uso de
su otra nacionalidad durante tres años. Sólo a partir de ahí
entiende que se debería tratar a El Bay como ciudadano no
español. "Se sienta un precedente muy peligroso", apostilló.
En lo que respecta a Ali Aarras, además de que nació en
Melilla y de que cuenta con nacionalidad belga, Benyhaya
recordó que el convenio de extradición entre ambos países
establece que si tiene una causa abierta en España debe
permanecer en el país para que sea juzgado por ello.
Igualmente, señaló que el Código Civil de Bélgica establece
que siempre tendrá preferencia la nacionalidad del país
flamenco antes que cualquier otro pasaporte, por lo que se
le tiene que considerar como ciudadano belga, es decir de la
Unión Europea, y por lo tanto con las garantías jurídicas
que ello conlleva. En este sentido, apuntó que también
existen sentencias en países comunitarios en las que se
indica como los ciudadanos de la Unión Europea merecen igual
trato jurídico. Según el representante de la CIM estas
consideraciones no han sido tomadas en cuenta por la
Audiencia Nacional, y sí el que Marruecos solicite su
extradición a pesar de que no haya presentado ningún
documento en el que se demuestre que Arrás es ciudadano del
Reino Alauí.
Para Benyaya el hecho de que ambos acusados sean musulmanes
ha pesado mucho más que el que cuenten con pasaportes
comunitarios "y por ahí la Comunidad Musulmana no va a
pasar". De hecho recuerda que ya el Consejo de Gobierno en
su día da "prejuzgó" ambos acusados como "ciudadanos
marroquíes", dando de esta forma luz verde a la Audiencia
Nacional a su extradición. Por su parte, la presidenta de
Intercultura, Yonaida Sellam, además de volver a mostrar su
solidaridad con la familia, considera que con esta medida
sienta "un nefasto precedente para los melillenses de
confesión musulmana". Por ello instó a Juan José Imbroda, a
que actúe para intentar que no se lleve a efecto la
extradición de El Bay y Aarras.
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