La Unión General de Trabajadores (UGT) de Ceuta, que forma
parte del Comité Local de Seguimiento del Programa Operativo
del Fondo Social Europeo, se ha posicionado respecto al
acuerdo de la Consejería de Empleo de la Ciudad Autónoma de
utilizar estos fondos con el objeto de avanzar en la
conciliación de la vida laboral y familiar, ya que se prevé
que finalicen en 2013. Por ello, el sindicato cree que las
medidas a este efecto deben llevarse en el marco de un Plan
Regional.
La propuesta acordada en el Pleno de la Asamblea fue
presentada por la coalición electoral de la Unión
Democrática de Ceuta e Izquierda Unida (UDCE-IU), que
solicitó la implementación de ayudas o subvenciones a través
del Fondo Social Europeo en sus programas Regionales para
dos objetivos: otorgar una subvención a los gastos derivados
de la contratación de personas desempleadas, expecialmente
mujeres, que sustituyan a la trabajadora autónoma durante el
periodo de descanso por maternidad o adopción; y en el
supuesto de que se trata de una empleada al servicio del
hogar, una ayuda por importe equivalente a la aportación de
la empleadora al régimen especial de la Seguridad Social de
empleados del hogar durante un periodo máximo de un año.
La propuesta fue bien acogida en el Pleno del pasado 10 de
diciembre por el consejero de Economía y Empleo de la
Ciudad, si bien lo condicionó a la viabilidad jurídica y
técnica y a su aprobación por el Comité Local de Seguimiento
del Programa Operativo del Fondo Social Europeo, que
conforman la Ciudad Autónoma, el Servicio Público Estatal de
Empleo (SPEE), la Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE),
la Cámara de Comercio y los sindicatos UGT y Comisiones
Obreras (CCOO).
El de UGT es el primer posicionamiento de los componentes
del Comité Local de Seguimiento del Programa, que argumenta,
respecto al primer punto de la propuesta de UDCE-IU, que la
subvención para las sustituciones de las trabajadoras
autónomas durante la baja por maternidad o adopción “se
consideraría adecuada si se llevara a cabo en el marco de un
Plan Regional para la Conciliación, puesto que garantizaría
una continuidad y no una subvención temporal”, ya que el
Fondo Social Europeo se prevé que finalice en el año 2013.
Con respecto a la segunda petición de UDCE-IU, UGT considera
que no es la vía adecuada para ello, ya que “la mayoría de
dichas empleadas son transfronterizas y, al no ser
ciudadanas europeas, no podrían ser destinatarias de la
subvención que otorga el Fondo Social Europeo”.
La central sindical concluye recordando “la necesidad de la
implicación de todos los agentes sociales en el diseño,
puesta en marcha y evaluación de un adecuado Plan Regional
para la conciliación de la vida laboral, familiar y
personal”.
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