La Iglesia de Nuestra Señora del Carmen ha sufrido varios
desperfectos en los continuos temporales de lluvia y viento
del invierno y el otoño. El problema está enfocado en la
techumbre exterior que se encuentra desgastada y permite que
entre la lluvia provocando el debilitamiento de dos zonas
decoradas con escayolas y el arrastre de la pintura de las
paredes. Además la fachada trasera de la iglesia presenta
varios claros producto del batir del oleaje en los días de
fuerte viento.
Las duras condiciones meteorológicas del otoño y el invierno
están pasando factura a multitud de edificios de la ciudad.
La iglesia de la Almadraba sufrió una reforma antes del día
de la Virgen del Carmen a la que le faltó la
impermeabilización del tejado. A partir de las lluvias de
finales de septiembre la techumbre exterior ha empezado a
verse afectada y el agua ha comenzado a filtrarse al
interior de la iglesia.
El deán de la catedral y secretario de la Vicaría, José
Manuel González, aseguró ayer que “el propio pesidente de la
Ciudad, Juan Jesús Vivas, ha mostrado un máximo interés por
el arreglo de los desperfectos”. La Viceconsejería de
Servicios Urbanos ha elaborado un presupuesto para acometer
las obras en el santuario de 35.000 euros y se espera que
las obras comiencen en breve.
Además de avanzar en el desgaste de la techumbre exterior,
las filtraciones de lluvias llegan a los muros interiores
del santuario. “Hay dos zonas decoradas con escayolas, que
con el efecto del agua, se está produciendo un
debilitamiento en su estructura y ya presentan varias
manchas”. Además la pintura de las paredes se está viendo
afectada igualmente por la humedad de las precipitaciones.
“Lo que queremos hacer es aplicar un tratamiento de
impermeabilización en el falso tejado”, explicó el
viceconsejero, Gregorio García Castañeda.
La fachada de la iglesia de la Almadraba encarada a la playa
también ha sufrido desperfectos fruto de las condiciones
meteorólogicas por los temporales de viento. Servicios
Urbanos repondrá la fachada y planteará a Costas poner algún
tipo de contención que evite el batir del oleaje.
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