Pocos desconocen ya que el efecto invernadero propiciará un
cambio climático en el planeta con consecuencias
difícilmente pronosticables. ¿Pero qué que ocurrirá cuando
todo esto suceda? Un reportaje producido por Radio Santec
mostraba tanto los graves efectos que se esperan, así como
la posibilidad que tiene aún cada persona para contribuir
activamente a aminorarlos. El reportaje incluía una
alternativa efectiva cuando todavía pocos se atreven a
hablar de ello, a la vez que se indicaba cómo se podrá
ayudar a los más afectados.
En muchos lugares de España ya se está comprobando que
fenómenos como las fuertes Tormentas se incrementan, al
mismo tiempo aparecen devastadores huracanes y tornados como
los vividos en Málaga, Cataluña y cornisa Cantábrica.
También comprobaremos como los valores medios del verano
serán cada vez más secos, con aumento de la sequía y por
tanto expansión de los desiertos. De hecho se ha
pronosticado que muchas zonas del Mediterráneo se
convertirán en zonas desérticas.
Por otra parte y como bien ha pronosticado el instituto de
Postdam se vivirán serios problemas con las inundaciones al
producirse un aumento en el nivel del mar de hasta 1 metro.
Las consecuencias por ejemplo en un país como Egipto donde
12 millones de personas viven en la rivera del Delta del
Nilo, serían que con una subida de 50 cm. tendrían que
trasladarse hacia el interior. En Bangla Desh serían 70
millones de personas las que se verían afectadas. De hecho
tanto en las Islas Salomón como en las Maldivas ya se están
tomando medidas de prevención. Pero ¿están los Gobiernos
pensando en las consecuencias sanitarias que estas
migraciones ocasionarán? A este respecto un estudio
publicado en la revista “The Lancet” afirmaba que en los
próximos decenios tendrán lugar enormes olas de calor en
Estados Unidos y Europa, con niveles más altos en las
grandes ciudades y la consecuente aparición de insectos
tropicales.
El presidente del Panel Intergubernamental del Cambio
Climático, Pachaury, dijo en una conferencia de prensa que
la medida más efectiva para confrontar el cambio climático
es renunciar al consumo de carne. De hecho en Alemania el
Ministerio de Medio Ambiente recomendó justamente una
reducción drástica lo que supondría a su vez una buena
medida para frenar el hambre en el mundo, puesto que aunque
parezca que no hubiera suficiente alimento para todos, el
hecho es bien distinto, pues la Tierra da alimento para
12.000 millones de personas, sin embargo un porcentaje muy
elevado de todas las cosechas mundiales de cereal van
destinadas al pienso de los animales que se consumen
principalmente en el primer mundo. Mientras tanto
inexplicablemente el número de muertos a causa del hambre
aumentó en 2008 en 75 millones de personas con respecto al
año anterior. A pesar de esto cada año se crían en el mundo
1.300 millones de reses, las que necesitan entre 7 y 16
kilos de cereal y 20.000 litros de agua potable para
producir un único kilo de carne vacuna. ¿Cuántos niños se
podrían alimentar con este grano y esta agua? ¿Cuánto se
podría todavía evitar?
Vida Universal *
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