PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales

 

 

sociedad - DOMINGO, 8 DE FEBRERO DE 2009


manolo lago. archivo.

Las Entrevistas del Quim
 

Ceutíes en el exilio. Hoy:
Manuel Lago Cuadro

Nací en el Pozo Rayo, en la Cortadura
del Valle, pero me crié en el Centenero
 

CEUTA
Quim Sarriá

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Barcelona.- Un hombre nacido en Ceuta y que reside en Montcada i Reixac, (área metropolitana de la provincia de Barcelona) es el escogido para someterse al suplicio de responder a preguntas que tienen como principio sacar algo de la humanidad del mismo. Salió de Ceuta joven, con veinte años, y nada más llegar a las tierras del cava y de la industria, comenzó a ejercer como Funcionario de la Admón. Local:

No contento con ello, aún le sobró tiempo, por las tardes, para impartir clases como profesor de Formación Humanística en IFP.

Fue un magnífico colaborador, como columnista, en la sección Vallés Occidental del desaparecido periódico “El Noticiero Universal” de Barcelona.

Pregunta: Sabemos que eres caballa, pero… ¿en qué lugar de Ceuta viste la luz?

Respuesta.- Nací en el Pozo Rayo, en la Cortadura del Valle, pero me crié en el antiguo y desaparecido Centenero.

P: En aquellos tiempos… ¿venías con un pan bajo el brazo o te encontraste con problemas?

R: En la posguerra ¿quién venía con ese pan? Pero a decir verdad, yo, no recuerdo haber pasado dificultades. Mis padres eran de la clase media alta. Regentaban el comercio de ultramarinos. Por lo tanto, no hubo problemas.

P: ¿En cual colegio comenzaste a formarte?

R: La Primaria de aquella época, lo comencé en un colegio situado frente a Casa Serafín y que se llamaba “Sagrada Familia”. De ahí salí preparado para realizar el ingreso en el Instituto, en este caso fue en la Escuela Pericial de Comercio, donde hoy se encuentra el Instituto Abyla. Estudios que hoy son Empresariales. Del profesorado, recuerdo a Juan Morejón. Y como el mundo sigue dando vueltas y vueltas, un día, recibí en casa una llamada de otra profesora de aquella época y residente en Barcelona: era, Dª Sara Pérez Naya. La emoción nos embargó a los dos y el tiempo era poco para recordar tantas cosas.

P: Siempre se ha creído que los primeros años forjan el carácter del ser humano… ¿Tienes un carácter fuerte?

R. Bueno, el carácter se va formando desde la infancia en el ser humano. En mi caso, no es que sea fuerte, sino más bien reservado e introvertido, que no tiene porqué ser fuerte.

P: Sigo con lo del carácter, ¿tienes una personalidad definida?

R: Por supuesto que sí. Ni es variable ni soy persona de ideas fijas. Depende mucho de las situaciones o entorno. En un encuentro, una reunión o conversación, no te puedes despeñar defendiendo unos criterios o unas ideas, aunque tu personalidad sea la que es.

P: Pasemos al término laboral, ¿cuál era tu entorno entonces?

R: Si seguimos hablando de mi juventud, te diré que era el de estudiante. No obstante, ayudaba en todo lo que podía a mi padre en la tienda de ultramarinos del barrio, éramos familia numerosa y tenía que ser así.

P: ¿Empezaste a trabajar en Barcelona y a qué edad?

Enseguida preparé oposiciones en la Administración Local. Fui el número uno de todos los presentados. Estaba recién llegado de Ceuta.

P: ¿Por qué te fuiste?

R: Esta misma pregunta me la hago yo constantemente. ¿Y por qué hoy día, siguen marchándose la juventud caballa a la península? La creencia que tienen todavía aquellos que quedaron, de que los que se marcharon a las grandes ciudades, la mayoría eran gentes sin oficio, ni estudios. Grave error. Desconocimiento absoluto de la realidad. Creo que en Ceuta, ni todos fueron funcionarios militares y civiles, ni tampoco todos pescadores y contrabandistas. El motivo que siempre ha habido, hay y habrá, será el de abrirse camino acorde a las circunstancias personales de los individuos, y a la demanda del mercado laboral que la ciudad autónoma no te ofrece.

P: ¿Encontraste lo que esperabas?

R: Más, si cabe. El pueblo catalán supo aprovechar aquella mano de obra muy profesional en todos los niveles, unos con más, otros con menos, pero todos encontramos el lugar adecuado a sus capacidades. Como reciprocidad, los ceutíes supimos integrarnos de pleno en la sociedad catalana. Tenemos dos idiomas que nos enriquece por completo, y muchos descendientes de aquéllos primeros caballas, hoy forman parte de una elite en la sociedad catalana como es: la medicina, la abogacía, educación o funcionario de ministerios, cosa que tal vez en nuestra tierra, habría sido imposible.

P: Sabemos que formaste una estupenda familia, ¿Cómo fue eso?

R: El flechazo propio de la juventud.

P: ¿Te consideras buen padre?

R: De todo corazón. Los cuatro formamos un todo. Ahora, una más, la nieta.

P: ¿Formáis una gran pareja?

Nos casó un cura obrero. Y sigo diciendo: “hasta que la muerte nos separe”. Tú ya conoces a mi esposa. Una persona agradable, simpática y de saber estar.

P: ¿Consigues hacer amigos con facilidad?

Primero estudio su personalidad y forma de ser, luego: decido.

P: ¿Alguna vez te has encontrado en desacuerdo con algo?

Por supuesto que sí. Nadie tiene la verdad absoluta.

P: En el entorno social… ¿cómo es que te encontraste con la Casa de Ceuta?

La primera vez fue con la aparición de un anuncio en La Vanguardia de Barcelona. Entonces era el Dr. Navarro quien tomó las riendas. Hubo un tiempo que perdí la dirección por los cambios de sede, hasta hace unos años que di con ella.

¿Colaboras con asiduidad en la entidad?

Tú ya sabes lo que pasa cuando se reside fuera de la capital. Suelo aparecer dos o tres veces por semana, e intento ayudar todo lo que puedo.

¿Cómo te llevas, sinceramente, con los demás miembros de la Casa?

Yo creo que bastante bien con todos, respetando las ideas y criterios de cada cual.

¿Te consideras hombre honesto?


Fíjate como me considero: Honesto, decente, casto, virtuoso, digno, honorable, limpio y todos los demás sinónimo. Ahora bien, como humano tengo defectos.

¡Vaya!, tal vez te merezcas una peana de santo ¿Cómo reaccionas ante situaciones de estrés?


Mal parado.

Ahora comentemos algo sobre nuestra ciudad ¿Sientes nostalgia por ella?


Más que nostalgia, buenos recuerdos. Dejé muchos y buenos amigos tanto de barrio como de estudios. Piensa que salí con veinte años. La edad de las amistades.

¿Vas a menudo?


No tanto como quisiera.

¿Tienes familia en la Perla del Mediterráneo?


Sí. Todavía me queda una tía en la barriada Zurrón, que hace muchos años que no la visito.

¿Qué recuerdos más imperecederos tienes?


Los propios de la juventud estudiantil. Recuerdo una vez que los trabajadores de autobuses que nos llevaban al instituto hicieron huelga…, sólo por un día, y creí que aquello iba a ser una guerra, aparecieron los grises por todas partes. Me dio miedo.

Por lo demás, los sueños dorados de la juventud.

Cuéntanos alguna anécdota de tus tiempos de profesor de Formación.


Hubo algunas. Pero la que me dio más satisfacción, que más que anécdota, para mí fue toda una lección magistral de psicología ante el calvario de una alumna que siendo buena estudiante, llevaba todo un trauma, una carga en su corazón y un desasosiego impropio en una chica joven. Quise saber las causas y, hablando con ella supe lo que tenía: sí, tenía un hermanito con el síndrome de Down, y ella, junto a sus padres llevaban la cruz. Ello, me hizo ser más consciente de mi labor pedagógica. La puse en el primer asiento para que atendiera mejor y, con el tiempo… pudo sacar los estudios. Hoy, es toda una mujer casada y con mucho agradecimiento. No la olvido nunca.

Si tuviera más espacio en nuestro periódico “El Pueblo de Ceuta” te habría sometido a una fuerte y larga andanada de preguntas, pero como todo tiene un límite y para terminar por hoy, di algo al Gobierno de nuestra ciudad y a sus ciudadanos.


Lo tengo muy claro. A nuestra primera autoridad, le pido más dinero para el sostenimiento de la sede de la Casa de Ceuta en Barcelona, esto sea dicho a título personal. El centro necesita mucha atención.

Y, que gracias a las representaciones que se llevan a cabo tanto en la capital como en la provincia, y otros medios como son: Internet en su convocatoria anual literaria, conocen más y mejor la ciudad, tanto política como culturalmente. Y a sus ciudadanos, que tomen buena de que un ceutí en la península es un medio de transmisión vehicular de la cultura caballa.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto