El representante en la Autoridad Portuaria de Comisiones
Obreras, Jesús Barrientos, ve “bastante negro” el futuro del
sector pesquero en Ceuta. No en vano, el año pasado las
capturas que se han registrado sumaron las 65 toneladas,
que, comparativamente a las 114 toneladas obtenidas en 2007,
supone una reducción del 42,98 por ciento en el total de
pesca.
El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino ha
abierto recientemente el plazo para la solicitud de ayudas
por el paro biológico e igualmente la Ciudad ha concedido
una subvención por el periodo navideño a través de la
Consejería de Asunto Sociales. El problema es que la
sociedad no puede acceder a las ayudas porque no se
encuentra al corriente del pago de la Seguridad Social.
Tampoco puede afrontar ese pago por la carencia de pesca.
“La ley es la ley en este caso. Pero la Ciudad debería
buscar una solución para que se pueda acceder a las ayudas
de alguna forma”, señaló Barrientos. Lo primero que se debe
hacer es avaluar el sector atendiendo a la excepcionalidad
que presenta en Ceuta: “Las capturas aquí tienen un límite
muy pequeño, en la Península muchos barcos son de altura y
además tienen una estructura sindical bien definida. Aquí no
hay filiación y tampoco un delegado en las embarcaciones, en
otras zonas se hacen elecciones en los buques. En Ceuta
“casi todo el pescado que se consume proviene de Marruecos,
quizás debería subastarse en lonja para aumentar un poco los
precios”.
El representante de la Comisión Ejecutiva del Sector del Mar
de CC.OO., Juan Manuel Trujillo, ha mostrado su interés por
visitar Ceuta y mantener reuniones con representantes del
sector pesquero para ver cuáles pueden ser las posibles
salidas.
Barrientos considera difícil la continuidad de la pesca en
la ciudad: “Es un trabajo que antes pasaba de padres a
hijos. Pero en la situación en la que se encuentran ahora,
¿qué padre va a querer que se dedique a la pesca?”. Para
sindicalista sólo existen dos posibles salidas a la
situación “la reconversión o la desaparición”. Barrientos
considera igualmente que Ceuta se enmarca en la situación
general por la que atraviesa el sector en España, “que es
terrible”.
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