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El sindicato ANPE ha admitido que la sentencia del Tribunal
Supremo sobre Educación para la Ciudadanía coincide en
líneas generales con la postura que ha mantenido esta
organización respecto de la asignatura, aunque sí ha
mostrado su aspecto crítico en relación a la consideración
de que como está concebida “resta importancia a la acción
tutorial e interfiere con materias como Filosofía y
Humanidades”.
La secretaria general de ANPE en Ceuta, Remedios Acosta ha
admitido que el sindicato de la Enseñanza que representa
mostró esde el primer momento su rechazo a que los alumnos
menores de edad pudieran ejercer la objeción de conciencia
“ni ante ésta ni ante ninguna otra materia obligatoria del
curriculum educativo”.
Es el momento de ser positivos, dice Acosta, para ANPE “una
vez resuelto el debate sobre la objeción, es el momento de
diseñar la EpC correctamente y dotarla de verdadero
significado”. Realmente el sindicato tiene “muy claro” y así
se ha defendido en distintos foros, que el contenido de la
Educación para la Ciudadanía “ebe centrarse exclusivamente
en los principios y valores constitucionales, tal como
sucede en el resto de Europa, sin imponer a los alumnos
criterios morales de índole personal, cuyo ámbito de
transmisión es la familia. Es exactamente lo mismo que ha
dictaminado el Tribunal Supremo”, argumenta Acosta quien
hace un llamamiento para que el debate “no se cierre en
falso”.
Asegura que la Epc, tal y como está planteada, “invade
contenidos que corresponden a las materias de Conocimiento
del Medio en Primaria y Filosofía en Secundaria. Además se
estructura sobre técnicas de grupo, discusiones y debates –
que son dinámicas de aprendizaje pero no contenidos en sí
mismos-, y sin embargo convierte en contenidos aspectos que
pertenecen a ámbitos estrictamente personales”, explica la
representante en Ceuta de este sindicato. En cualquier caso,
ANPE incide en el hecho de que el debate sobre esta
asignatura “desvía la atención de los auténticos problemas
del sistema educativo” pero resulta imprescindible “hacer de
esa asignatura una verdadera materia”.
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