El portavoz de la comunidad de propietarios del Tarajal.
Mohamed Ahmed, tiene intención de solicitar a la Ciudad su
actuación para que, a través del proceso de regularización
de las naves, se acabe con el negocio de las llamadas
consignas. Este defiende que quienes se dedican al
almacenaje y distribución de bultos deben reconvertir su
actividad.
Los últimos incidentes protagonizados entre agentes de la
Policía Nacional y empresarios de las naves del Tarajal
parecen haber motivado cierta reflexión entre la comunidad
de propietarios del polígono. Aunque tarde, parece que hay
quien se ha dado cuenta ya de que la actividad generada al
amparo de los porteadores reporta más perjuicios que
beneficios al conjunto de comerciantes de la instalación.
Calles cortadas, dificultades para el tránsito a pie y en
vehículo por los viales, avalanchas y caos. Son algunas de
las consecuencias derivadas de la presencia de los
porteadores en el Tarajal. Una instalación formada por
cuatro polígonos, con más de 200 naves, de las que “sólo
unas 30” se benefician del almacenaje y distribución de
bultos como consignas, según apuntó Mohamed Ahmed.
Estas consignas, que ocupan ahora un espacio residual en la
actividad global del Tarajal, corren peligro de extenderse
amparadas por la crisis económica. A río revuelto ganancia
de pescadores, y esas son las llamadas consignas. Únicos
negocios que parecen económicamente viables dada la actual
situación del polígono.
Vistos los últimos acontecimientos, la comunidad de
propietarios piensa seriamente elevar una propuesta formal
de cierre del Biutz a las autoridades, según precisó el
portavoz. La desunión constatada fechas atrás puede quedar
atrás si los comerciantes se aglutinan en torno al cierre
del paso, la eliminación de los porteadores y la orientación
del polígono hacia una actividad comercial ordinaria.
|