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La batida de jabalíes que la Consejería de Medio Ambiente
había propuesto que comenzara mañana para controlar la
superpoblación del animal en García Aldave se ha visto
finalmente cancelada. La Ciudad posee las atribuciones
necesarias para poder decretar una batida extraordinaria al
tener transferidas las competencias en materia de caza pero
solicitó colaboración a Delegación del Gobierno para poder
garantizar la seguridad de la zona en la que se iba a
realizar la montería.
Según la viceconsejera de Calidad Ambiental y presidenta del
Consejo de Caza, Celinia De Miguel, la negativa de
Delegación ha venido dada por no poder garantizar la
seguridad debido al número de inmigrantes que hay en la
zona. Además en la institución de la Plaza de los Reyes
prefieren otras medidas para disminuir la población de
jabalíes como las jaulas trampa que ya están siendo
utilizadas. De Miguel dijo que en la Consejería “no
compartimos la visión dada en Delegación y seguimos creyendo
que lo más efectivo es la batida de caza”. La viceconsejera
explicó que en muchas ocasiones “las trampas han aparecido
rotas” aunque desconoce quienes son los autores de los
boicoteos, “los cazadores son una sociedad colaboradora, hay
episodios de furtivismo pero tampoco podemos garantizar que
sean ellos”.
Las cuatro batidas programadas en las dos próximas semanas
tendrán que esperar hasta, al menos, la apertura del próximo
curso político en septiembre. La Consejería está
planteándose que el jabalí aparezca en la siguiente orden de
veda y en el Plan Técnico de Caza que saldrá este año a
concurso y será adjudicada a una sociedad cinegética. El
presidente de la Sociedad de Caza, Antonio López, no se
mostró especialmente decepcionado con la cancelación:
“Nosotros creemos que el método correcto es que el jabalí
entre en la orden de veda y esperamos que así se decida en
el próximo Consejo de Caza”.
Celinia De Miguel aseguró que se seguiría haciendo una
reducción selectiva de la especie para minimizar los daños
que pueden provocar en los vallados y pequeñas explotaciones
del monte así como para reducir el peligro que suponen para
las personas.
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