La Policía Local de Ceuta ha interceptado más de 2.500 kilos
de alimentos clandestinos que habían sido introducidos en la
ciudad de forma ilegal desde Marruecos y que iban a ser
vendidos en la calle sin pasar ningún tipo de control
sanitario.
Según ha informado en una nota el Gobierno ceutí, la
intervención se ha producido en los tres últimos días como
consecuencia de los controles puestos en marcha para
erradicar la venta ambulante cerca de la frontera,
concretamente en el polígono industrial del Tarajal.
Los alimentos fueron interceptados como consecuencia de
varios controles realizados en distintas zonas de la ciudad
autónoma dentro de un programa del gobierno local para la
erradicación de la venta ambulante, el cual se ha
intensificado en estos días.
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