Un Pleno de trámite, con dos únicas disposiciones generales
(las que presenta el Gobierno) sin sustancia, acabó con la
primera escenificación en público de dos formas de hacer
política, la de UDCE, que a pesar de que no gustarle por
timorata ni un pelo la declaración institucional pactada con
PP y PSOE sobre Gaza la votó a favor en aras de dar al mundo
una escena ceutí de consenso, y la de IU, cuyo diputado,
Mohamed Haddu Musa, rompió por primera vez la disciplina de
voto del grupo y rechazó el microtexto consensuado por los
tres portavoces parlamentarios la semana pasada.
El caso fue que Vivas, como presidente, dio lectura al
mismo, que reclamaba “una paz duradera en la zona que se
fundamente en el respeto y la convivencia” y cuando la
secretaria general hizo recuento de los votos le faltó uno,
el de Musa, que había advertido ya previamente a Ali de sus
intenciones. “Esta declaración se hace tarde y mal porque en
Palestina no hay una guerra sino un genocidio por el que hay
que condenar al Estado de Israel”, dijo Musa en sede
parlamentaria durante el tiempo que Vivas le concedió en el
uso de la palabra pese a no ser portavoz, momento que
aprovechó para advertir de que “nadie debe malinterpretarnos
porque sabemos diferenciar entre nacionalidad y religión,
que es un asunto personal”. Como además la propuesta no
llevaba acompañada ninguna propuesta de ayuda alimentaria,
algo que sí se aprobó posteriormente a instancias de una
moción del PSOE, Musa votó no y acabó enzarzándose con los
diputados socialistas por sus críticas a la “doble moral”
con que a su juicio se está movimiendo el partido en este
tema.
En el receso de la Sesión Plenaria Musa explicó que él no
puede “votar contra sus principios” y recordó que “si IU a
nivel nacional está pidiendo la retirada del embajador
español en Israel y reprochando la doble moral de Zapatero,
que por un lado apoya al Pueblo Palestino en manifestaciones
y por otra no hace nada para remediar la venta de armas al
Estado de Israel”.
“Derecho y obligación”
“He votado en contra de esta declaración institucional
porque mi derecho y mi obligación era rechazar un texto que
sólo pretende hacernos quedan bien y que llega tarde y mal
porque no refleja la realidad de Palestina”, dijo Musa,
según cuyo parecer “allí no hay una guerra, sino unos
crímenes contra la Humanidad que hay que denunciar a los
cuatro vientos”. Para “evitar malentendidos” Musa quiso
dejar claro a los medios que IU “rechaza al Estado
terrorista de Israel, una posición que no debe mezclarse con
cuestiones religiosas porque mi voto no tiene nada que ver
con el pueblo judío como tal”.
Para terminar el líder de IU insistió en que su decisión
estaba tomada “mucho antes” de que la UDCE se sentase con el
PSPC. “Puede puede hablar y pactar con quien quiera”,
aseguró, aunque cuando se le preguntó por dichas
conversaciones se limitó a tildarlas de “atípicas”. “No
ponemos ninguna objeción y no nos parece mal; que tengan
toda la suerte del mundo”, dijo el político ceutí, quien
advirtió a Ali de que “nuestros puestos en los consejos de
administración de sociedades municipales son del grupo, que
se debe a unos votos”. “No tenemos inconveniente en que
compañeros del PSPC trabajen con nosotros, pero las formas
molestan”, admitió.
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Los portavoces dicen que lo sucedido no afectará a su pacto
UDCE e IU no romperan el acuerdo
político que les llevó a presentar una candidatura conjunta
en 2007 y a “coordinar” su acción política durante la
legislatura que termina en 2011. Así lo aseguraron al menos
ayer sus dos portavoces, Mohamed Ali y Mohamed Haddu Musa.
El primero reconoció que su compañero de bancada le había
advertido previamente de que rechazaría la declaración
institucional en coherencia con “sus principios” y con “la
posición de su partido a nivel nacional”, por lo que dijo
“entender” su postura. El rebelde tampoco fue más allá de
criticar el contenido de la declaración, con la que según su
parecer UDCE tampoco debería haberse alineado ni siquiera
para no quebrar el consenso. “Nuestra propuesta original era
mucho mejor”, afirmó.
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