Durante estos días hemos podido comprobar en los medios de
comunicación numerosas denuncias del estado de las
carreteras de nuestra ciudad. Pero no sólo las carreteras
sufren todos estos desperfectos ya que existen en nuestra
ciudad muchos edificios que se están “cayendo a trozos” y
que la lentitud burocrática, en algunos casos, y la dejadez
en otros hacen peligrar no sólo el estado de conservación de
estos emblemáticos edificios sino incluso la integridad de
las personas que hasta ellos se acercan, como es el caso de
la céntrica Iglesia de San Francisco, cuyo estado es
bastante lamentable.
Hace unos días nuestro rotativo visitó el interior de la
Iglesia de San Francisco alertado por desprendimientos de
numerosos cascotes y pudimos observar el lamentable estado
en el que se encuentra este céntrico templo de nuestra
ciudad donde diariamente acuden cientos de personas a
mantener sus oraciones con Dios.
Humedades, grietas, desprendimientos y una amplia red
desplegada por toda la iglesia para evitar algún accidente
de mayor calado, se entremezclan con el magnífico retablo
del siglo XVIII y las imágenes que allí se encuentran a
culto.
Tal y como pudo comprobar nuestro rotativo, el estado de la
Iglesia de San Francisco ha empeorado a raiz de las obras
llevadas a cabo en la colindante Plaza de los Reyes, donde
el espectacular aspecto de la fachada, no deja de ser sólo
eso ‘fachada’ ya que la paupérrima imagen que ofrece el
interior no debería producirse en ninguna iglesia de nuestra
ciudad y máxime si esta es la que más volumen de fieles
recibe diariamente.
Precisamente vecinos de la zona, muy vinculados con la vida
cristiana de la Iglesia de San Francisco, afirmaron ver como
muchas de las tejas de la cubierta han cedido durante las
obras efectuadas en la Plaza de los Reyes, y que esto ha
provocado que se haya empeorado el estado de la Iglesia, que
comenzó con la caída de polvo y caliche y ya son cascotes de
considerable tamaño que pueden provocar algún día alguna
desgracia.
A este respecto se sabe que el arquitecto municipal, Javier
Arnáiz ha visitado ya el templo para proceder a elaborar un
proyecto de actuación que presentar a la Vicaría General de
Ceuta, y del que se desprende, según fuentes consultadas,
que las obras superarían el millón de euros, ya que la
cubierta de la Iglesia de San Francisco debería sanearse por
completo, así como los incesantes problemas de humedad que
atacan al templo desde hace años.
Precisamente ayer estuvimos nuevamente en el interior de la
Iglesia para sacar fotografías que ilustrasen nuestra
información, y muchos de los fieles presentes en Misa de las
nueve de la mañana, se acercaron hasta nosotros para mostrar
su malestar por el estado del templo y para reivindicar a
través de nuestro medio una acción urgente, por parte de las
autoridades competentes, que lleve a la recuperación de esta
emblemática iglesia de nuestra ciudad la cual fue construida
entre los años 1712 y 1723.
Precisamente, el 19 de diciembre de 2007, el presidente de
la Ciudad Autónoma de Ceuta, Juan Jesús Vivas Lara, acudía a
la zona para comprobar el resultado de la reforma de la
Iglesia de San Francisco, donde se procedió a recomponer los
daños sufridos en esta iglesia durante las obras acometidas
en la plaza anexa. Según se destacó en aquel entonces, los
trabajos sirvieron para recuperar los contrafuertes que en
un momento dado pudo tener la iglesia y para reconstruir las
dependencias anexas al templo que habían sido demolidas.
A este respecto se puede decir que, más de un año después y
aunque parezca mentira, parte de la sacristía demolida con
motivo de las obras llevadas a cabo en la Plaza de los Reyes
sigue sin estar operativa gracias a la tranquilidad con la
que se están llevando estas obras de recostrucción.
Finalmente destacar que tanto el Obispado como la Ciudad
están al tanto del precario estado de la Iglesia y que
parece ser ya se han puesto manos a la obra, lo que pasa es
que, como siempre, hay que estar a expensas de los trámites
pertinentes, los cuales como se demoren mucho próximamente
hablaremos de levantar una nueva iglesia donde en su día
estaba ubicada la emblemática Iglesia de San Francisco.
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Los fieles atribuyen un estado ruinoso al céntrico templo
Muchos de los fieles que asisten
diariamente a esta iglesia que data de 1723 confiesan que
acuden a misa con cierto reparo debido al precario estado
que presenta la Iglesia desde hace tiempo y que más de una
vez han estado oyendo la Palabra de Dios cuando han crujido
las paredes, han caido pequeños trozos del techo o si ha
estado lloviendo les ha caido agua debido a las goteras. A
este respecto, una señora que diariamente acude a la Iglesia
para colaborar con los padres agustinos durante la Misa y
para adornar el altar mayor con flores, destacaba que es una
pena ver esta iglesia en este estado, afirmando que incluso
le ha llegado a comentar a diferentes miembros de la
Comunidad Agustiniana de llamar al programa de ‘Esta casa
era una ruína’ para que intentaran recuperar el estado
original del Templo, al cual le ha afectado en demasía las
obras realizadas en la anexa Plaza de los Reyes.
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