La Asociación Protectora de Animales y Plantas ha redactado
un proyecto en donde defiende el método de castración en vez
de la eliminación para disminuir las poblaciones de gatos
callejero. Varios veterinarios de la asociación están
trabajando junto a técnicos de Sanidad Animal en un
protocolo para disminuir el número de ejemplares que viven
en las calles.
La Asociación Protectora de Animales y Plantas de Ceuta
considera ineficaces los métodos tradicionales utilizados
hasta ahora para reducir la población de gatos callejeros:
“La retirada y eliminación y la captura y adopción se ha
comprobado que son de un alto coste y totalmente
ineficaces”. La Protectora apuesta para “conseguir un
equilibrio y bienestar entre las colonias y su entorno, el
único procedimiento efectivo y humanitario es la
esterilización de los animales y su posterior suelta en la
calle”.
En el documento se defiende que las colonias de gatos en la
ciudad producen efectos beneficiosos: “Contribuyen al
control de otras plagas de animales, tales como cucarachas,
ratas y ratones, así como el control sanitario sobre aves
débiles y enfermas. estas medidas profilácticas e higiénicas
han sido aplicadas con resultados ejemplares en otros países
como Inglaterra, Grecia, Alemania, Suiza, Francia e Italia,
así como en numerosas localidades españolas”.
La castración disminuye, según el documento, los problemas
de comportamiento que pueden molestar a las personas: “Se
reduce el merodeo de los animales en celo, las peleas
sexuales y los marcajes con la orina y garras. Mejora
igualmente el nivel sanitario y la calidad de vida de los
gatos”.
Hasta ahora se están realizando unas cinco castraciones
diarias de animales machos cuya intervención quirúrgica es
más barata. El proyecto recoge la vigilancia posterior de
los animales por los miembros de la asociación y
voluntarios. Los gatos intervenidos llevarán una marca en
forma de uve detrás de la oreja izquierda. “Así se puede
avisar en caso de ejemplares no identificados con objeto de
proceder a la captura selectiva”.
Las capturas se realizarán “mediante jaulas-trampa, no
permitiéndose ningún otro método estresante como el uso de
lazos o cerbatanas”. Una vez capturado, serán analizados por
un veterinario y los que tengan algún síntoma de emfermedad
“parasitaria, infectocontagios o traumática grave serán
descartados del programa de esterilización y serán
eutasionados”.
Las intervenciones se realizarán “mediante las normas más
estrictas del protocolo quirúrgico” sin diferencias “conlas
utilizadas en animales de clientes privados”. Por último la
asociación no cree necesario la vacunación antirrábica
“puesto que dichos animales puedean dar positivo en tests
posteriores. Cabe destacarse que en nuestra ciudad no
aparece ningún caso de rabia en animales de esta especie”.
El proyecto preparado por la Protectora nace de su
colaboración con la Consejería de Sanidad para la
disminución de la población de gatos. Se está elaborando
actualmente un protocolo por el que se determinará las
líneas de actuación.
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