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Si hay algo que se pueda considerar como valor hoy en día,
tal y como están las cosas, es renunciar a un trabajo de 22
años, para montar un negocio y emprender otra vida laboral
muy diferente a la que uno venía haciendo hasta la fecha, y
eso es lo que han realizado Carlos Toledo e Isabel Pérez,
los cuales son los propietarios de la nueva Cafetería ‘Carlis’.
Carlos Toledo pese a pegarse 22 años trabajando en la
conocida joyería ‘Chocron’, la inquietud de su vida siempre
ha sido intentar montar un negocio familiar enfocado al área
de la Hostelería; área esta donde comenzó con tan sólo 13
años y a la que estuvo ligada durante seis años.
Tras todos estos años, nunca había encontrado la posibilidad
de hacer realidad su sueño, hasta que gracias a un buen
amigo suyo, ‘Tato’ de la Academia Ecos, le comentó las
ayudas que, desde la iniciativa Ceuta Emprende, se podían
conseguir para montar algún negocio.
Así fue, y gracias a el apoyo y la ayuda prestada por Fati
Hamed y Merche Furnier que estudiaron su proyecto,
consiguieron esa ayuda ofrecida por la Ciudad Autónoma de
Ceuta, Procesa y los Fondos de la Comunidad Europea.
Gracias a este importante ‘empujoncillo’ y al magnífico
trabajo realizado por Nuria de Construmed Ceuta y Daniel
Rubio por su dirección facultativa han conseguido dotar a la
calle Real de una cafetería moderna dentro del clasicismo de
sus líneas donde ofrecer a la clientela, un magnífico café,
tal y como pudimos saborear durante la entrevista, así como
una gran variedad de dulces, productos ibéricos, quesos,
etc., que acompañar también con su amplia carta en cervezas
y vinos, y a unos precios muy asequibles con esto de la
crisis que nos está afectando a todos.
Además, esta coqueta cafetería ubicada exactamente en la
calle Real nº40, edificio Florencia, local nº3, posee dos
estancias muy diferenciadas donde poder pasar un rato
agradable en compañía de amigos y familiares. La primera,
nada más entrar con un total de cuatro mesitas bien
distribuidas y una barra de nueve metros con sus taburetes,
y una segunda parte a otro nivel y con cinco mesas donde en
un ambiente aun más acogedor ofrece a su clientela sentirse
como en casa degustando sus productos mientras el hilo
musical existente te introduce en una relajación casi total.
Finalmente destacar que la calidad de los productos, el
ambiente tan acogedor, el magnífico servicio y valor que
este matrimonio ha puesto para ver cumplido su sueño son
avales suficientes para que los ceutíes acudan a pasar un
buen rato en esta céntrica cafetería.
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