Ayer varios técnicos de la Ciudad se desplazaron al
cementerio de Santa Catalina para comprobar el estado de los
25 nichos que se vinieron abajo el pasado sábado. Las obras
contratadas de emergencia empezarán mañana y consistirán en
la demolición de las tumbas después de la exhumación y el
traslado de los difuntos. La forma de los nichos ha
favorecido, según el viceconsejero de Consumo, que no se
mezclen los restos.
Sanidad realizará unas obras de emergencia para desescombrar
los 25 nichos que se vinieron abajo el pasado viernes en una
zona que fue declarada en ruina hace más de tres años. Ayer
varios técnicos de la Ciudad se personaron en el cementerio
de Santa Catalina para analizar los métodos de trabajo y se
espera que las obras comiencen hoy. “Se va a demoler la
zona, antes se irán sacando con mucho cuidado los restos y
se trasladarán a otra zona del cementerio”, explicó el
viceconsejero de Consumo, Manuel Carlos Blasco.
El derrumbe se produjo, según el propio Blasco, “por las
continuas lluvias y los 90 años de antigüedad que poseen los
nichos”, las tumbas pertenecen a enterramientos que datan de
1914. El derrumbe en “vertical” de las tumbas ha favorecido
que “se haya respetado el orden de los enterramientos.
Además tenían una forma abovedada que ha ayudado a que no se
hayan producido mezclas en el derrumbe”.
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