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Este próximo martes quedará
marcado por ser la jornada en la que Partido Popular de
Ceuta y PSOE local se reunirán por vez primera oficialmente
tras la refundación de ésta última formación. El encuentro
motivado por retomar la comunicación en relación a la
reforma del Estatuto de Autonomía servirá para que Gordillo
y Carracao, máximos exponentes de estos dos partidos
políticos en Ceuta de implantación nacional se vean las
caras para tratar el futuro común de la ambición de acceder
a una mayor cota de autogobierno, mejorar su actual texto
estatutario y buscar el consenso necesario como para optar a
una elevación de rango para pasar a ser comunidad autonóma.
Objetivo éste último no sólo previsto en la Disposición
Transitoria Quinta de la Constitución, sino además ansiado
por los ceutíes que con vocación autonomista aun permanecen
atentos a que se den las circunstancias propicias como para
que los dos grandes partidos nacionales logren que Ceuta sea
reconocida por el Tribunal Constitucional como una autonomía
más, situación que en la actualidad no se da.
Pero la reforma del actual estatuto pese al tiempo que se
lleva hablando del asunto continúa en etapa previa. Se
pretende el máximo consenso lo cual es además de acertado,
aceptable, y se procura el acuerdo de partidos políticos y
entidades porque al fin y al cabo el estatuto afecta a todos
los ceutíes.
Con la seguridad de que lo que se establezca signifique la
protección de todos los ceutíes y con la confianza de que PP
y PSOE sabrán llevar el peso -porque les corresponde- de un
documento que sirva para regularnos durante las próximas
décadas desde la moderación, sin salirnos evidentemente de
la Constitución, pero logrando que seamos verdaderamente
iguales entre los iguales [al margen de más o menos
competencias], quedamos a la espera de que el recorrido de
las próximas semanas y meses concluya con la aprobación
unánime de la Cámara ceutí de un texto que salga también
adelante en su tramitación parlamentaria en las Cortes
Generales.
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OPINIÓN / EDITORIAL
