Es ceutí, ha vivido la mayor parte
de su vida en Ceuta, ahora está en Ceuta y si un día
cualquiera se va de aquí será porque no logre en su ciudad
un puesto de trabajo.
Durante dos o tres años ha tenido que estar fuera, se marchó
“aburrido” de esta, su ciudad, porque veía que aquí “no
había un puesto de trabajo para él”.
Ahora que el problema del trabajo, al otro lado del
estrecho, ha empeorado, de nuevo se ha venido a Ceuta,
preguntándose: “¿Ahora se acordará alguien de mí?”.
Y he dicho intencionadamente eso de “acordarse”, porque hace
10 años, cuando siendo un chavalillo de 17 o 18 años estaba
metido en el mundo de los toros y quería ser torero, aquí en
Ceuta, lo recuerdo perfectamente, las dos o tres veces que
él toreó en esta ciudad, tenía decenas de personas que, tal
vez, atraídos por el traje de luces, se acercaban una y otra
vez al chaval y cada palabra que le dirigían llevaba consigo
“una promesa”.
Él perdió dos o tres años metido en el ambiente taurino,
quería ser torero, pero eso era difícil, ganas tenía,
arriesgar arriesgaba tanto como el que más. Él, que no se le
olvide a nadie, también paseó el nombre de Ceuta por los
sitios donde toreaba, incluso recuerdo que yo mismo le pude
“hacer un sitio” en un cartel en Piedrahita y allí, todos
los que estaban en los tendidos se fijaban en “el chaval de
Ceuta”. Pocos sabían su nombre, lo que sí sabían era que un
chavalillo de Ceuta estaba toreando allí.
El tiempo ha pasado, el chaval dejó los toros porque no
tenía la ayuda, ni los padrinos necesarios para seguir ahí y
Ceuta se olvidó de él.
¿Por qué en esta ciudad se deja de lado a muchos nacidos
aquí y que nada malo hicieron para la ciudad?.
¿Es tan difícil, precisamente ahora, que alguien que no es
sospechoso de ir contra su pueblo, pueda tener un sitio
donde trabajar?.
Y aquí no se está pidiendo algo especial, aquí sólo se pide
que a un ceutí, que no tiene trabajo, se le dé la
oportunidad de trabajar en la ciudad, en lo que sea.
Hacía tres años que había perdido el contacto con él. Me lo
encontré el pasado lunes y realmente estaba dolido porque no
tiene esa mano que a otros se les ha tendido, con muchos
menos méritos que él tiene ahora.
Lo último que me decía es que este próximo lunes había
quedado con un constructor para ver si podía entrar a
trabajar ahí. Era el único camino, la única puerta
entreabierta que tenía hace dos días.
Y yo pregunto a cierto señor, él sabe que me estoy
refiriendo a él, muy metido en el Ayuntamiento, con algún
“agarre” para estas cosas, si ahora ha cambiado su forma de
pensar y toda la ayuda que le prometía los días que a su
lado entraba a la plaza de toros, por la puerta de
cuadrillas, sin pagar, si ahora ya no se puede acercar a él
para intentar lograrle ese trabajo.
A estas alturas, más de uno estará diciendo que en esa
situación hay muchos y es cierto, pero lo que nadie me puede
negar es que a este chaval, quienes simulaban apoyarle,
porque así salían en las fotos con el torero, ahora le están
traicionando, le están volviendo la espalda, cuando más
necesita tener algo para no tener que marcharse otra vez, a
la ventura y fuera de Ceuta. Si aquí se presume, a veces, de
ceutismo, no se puede dejar desamparado a un ceutí que es
“buena gente”.
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