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De forma indirecta los líderes de UDCE-IU y el PSOE de
Ceuta, Mohamed Ali y José Antonio Carracao, dejaron ayer
sobre la mesa de la opinión pública dos propuestas para unir
sus voces contra el recrudecimiento de la violencia en
Oriente Medio. El primero invitó al segundo a forjar juntos
una ‘Plataforma por una Palestina libre’. El segundo se
inclinó más por conseguir un gran consenso local “por la paz
en la región”.
Los matices son muy importantes. También en política. Que
UDCE-IU convocase sin previo aviso o sin consensuar con él
el manifesto final de la manifestación por la paz en
Palestina de anteayer hizo que el secretario general del
PSOE, José Antonio Carracao, no acudiese a la misma a pesar
de estar “de acuerdo en el 99%, si no en el 100%, de los
planteamientos que la sustentaban”, según recordó ayer.
Retraído por recelo a su contenido, Carracao y el PSOE de
Ceuta en general no participó de la marcha, pero tras ella
el líder socialista emitió un comunicado reiterando su
posición adversa a la actitud de Israel y denunciando la
quema de dos banderas de Israel y los gritos racistas y
generalizados contra el pueblo de Israel.
“La violencia no justifica la violencia”, tituló su nota.
Ayer, por el mismo procedimiento, UDCE-IU le recordó que su
papel en la iniciativa se limitó a “convocarla” y a
“coordinar el dispositivo de seguridad con los Cuerpos
competentes”. “Nos limitamos a canalizar de acuerdo con la
normativa la necesidad de gran parte de la población ceutí
de mostrar su rechazo por el genocidio en Gaza”, expuso el
grupo de Ali, que atribuyó las palabras de Carracao “al
oportunismo y al cinismo del que con la boca chica dice una
cosa y por detrás dice otra muy distinta”.
Al conocer, ayer, el contenido de la nota de UDCE-IU,
Carracao hizo propósito de enmienda “si el contenido del
comunicado del PSOE ha herido alguna susceptibilidad”. “En
ningún momento atribuimos a la organización de la
manifestación que amparase o incitase a la comisión de actos
como esa quema o esos gritos”, aclaró el líder socialista,
que no obstante reiteró que a juicio “la marcha se hubiera
cargado aún más de legitimidad sin ellos”.
Con respecto a sus críticas por la “unilateralidad” con la
que había actuado UDCE-IU el primer grupo de la oposición
quiso ir aún más allá. No sólo recordó que otras
organizaciones (entre ellas la UCIDCE) se habían adherido
libremente a ella por comunión de convicciones, sino que
planteó a Carracao su disposición a crear juntos “una
‘Plataforma por una Palestina Libre’ donde puedan tener
cabida todas las entidades, asociaciones, partidos y agentes
sociales que lo deseen”.
Además, dejó claro al socialista que si él convoca cualquier
marcha similar por el mismo fin “UDCE-IU no tendrá ningún
inconveniente en secundarla”.
Carracao recogió a medias el guante y, como si de una
enmienda transaccional se tratara, lanzó una contrapropuesta
en declaraciones a este periódico: “El PSOE de Ceuta ha
repetido en reiteradas ocasiones que es necesario que la
comunidad internacional imponga el cumplimiento de las leyes
y los convenios internacionales y haga factible garantizar
la seguridad al pueblo israelí y su derecho a una nación y a
su territorio libre al pueblo palestino”, repitió Carracao,
“pero como entendemos que también es nuestra obligación
hacer todo lo que esté en nuestra mano para lograr la paz en
la región nos parece que sería una gran idea reunir a todas
las comunidades religiosas y culturales de Ceuta, a todos
los partidos políticos y a todas las entidades que así lo
deseen para consensuar una posición en pro de la paz en
Oriente Medio”.
“Para el PSOE este tipo de movilizaciones deben encauzarse
de forma más consensuada, eso fue lo único que quisimos
dejar patente, porque ahí tenemos el ejemplo de cómo se ha
gestionado el asunto en Melilla”, completó Carracao.
Después de mucho pensárselo el PSOE de Melilla fue la única
federación socialista que se animó en España a participar en
una manifestación contra los ataques de Israel en Gaza que
han causado ya más de 400 muertos.
El acto de protesta que se celebró ayer en la ciudad hermana
reunió a formaciones políticas, asociaciones musulmanas y
organizaciones laicas como CCOO y UGT de la ciudad autónoma.
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