Si no con una reina maga, aunque casi (la titular del
Ministerio de Igualdad se comprometió a atender todas las
peticiones que le trasladó Vivas: mediar para tener un
juzgado local exclusivo de violencia de género y cofinanciar
el centro de asistencia integral a maltratadas que se
proyecta en el chalé de Ybarrola), la Ciudad Autónoma se
encontró ayer con una ministra, la gaditana Bibiana Aído,
que, por su cercanía y proximidad territorial y familiar a
Ceuta, pareció más integrada que ningún otro de sus
homólogos en su primer viaje a la ciudad, donde instó al
Gobierno local a trabajar juntos “con intensidad, voluntad
política y lealtad institucional”.
La ministra de Igualdad, la gaditana Bibiana Aído,
trasladará a los ministerios de Justicia e Interior y al
Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), órganos
competentes, la solicitud que ayer le hizo llegar
personalmente el presidente Vivas al objeto de que la ciudad
autónoma pueda contar con un juzgado específicamente
dedicado a atender los casos de violencia de género.
Igualmente, la ministra aseguró que estudiará el proyecto
que la Ciudad Autónoma debe remitirle sobre la creación de
un centro de asistencia integral para víctimas de maltrato
en el antiguo chalé de Ybarrola.
Así dijo que haría Aído durante su comparecencia ante los
medios de comunicación de ayer en el Salón del Trono del
Palacio autonómico, la primera sede institucional que visitó
en el curso del viaje que ayer giró, el primero desde que se
hizo cargo de la cartera ministerial, a Ceuta.
“Sin tener cara de rey mago”, ironizó la ministra más joven
de la democracia, “valoro muy positivamente todas las
peticiones que se me han traslado en relación con el
desarrollo de las políticas que se están realizando en el
ámbito de la Igualdad”.
“Las dos Administraciones estamos de acuerdo en la necesidad
de intensificar las líneas de colaboración existentes e
incluso emprender otras nuevas de cara al futuro”, prosiguió
Aído, quien reconoció que hay algunas temáticas “como la
lucha contra la violencia de género” en la que la
cooperación institucional “es imprescindible”. “Este
trabajo”, remachó, “sólo puede entenderse desde el esfuerzo
compartido y continuado; ya se ha realizado un esfuerzo sin
precedentes en medidas, recursos y acciones desde la
aprobación de la Ley contra la Violencia de Género, pero hay
que continuar trabajando con intensidad, con voluntad
política y desde la lealtad institucional”.
En ese sentido se mostró “satisfecha” por haber comprobado
“que también para la Ciudad es una prioridad” y aseguró que
“trasladará” al ministro de Justicia y a los demás órganos
gubernamentales competentes, como el de Interior y el
Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) la solicitud para
crear un juzgado dedicado en exclusiva a tramitar los casos
de maltrato doméstico.
Sólo durante el año pasado el Juzgado de Instrucción número
4 de Ceuta, al que se han atribuido las competencias sobre
violencia de género en la ciudad, tramitó 572 denuncias,
según los datos oficiales del Consejo General del Poder
Judicial (CGPJ).
Esta es, además, una reivindicación que va más allá del
ámbito político. La secretaria general de la Federación de
Justicia de la Unión General de Trabajadores (UGT), Victoria
Carrero, anunció este mismo mes tras hacerse cargo de la
dirección del sector a nivel federal que persistiría desde
nueva responsabilidad tanto en la necesidad de la
construcción de nuevo Palacio de Justicia en Ceuta como en
la creación de un Juzgado específico de Violencia de Género.
“Hemos visto que hay otras ciudades que tampoco llegan al
ratio para tener un juzgado de estas características y, en
cambio, lo tien3en”, ha explicado Carrero, quien recordó “la
gran carga de trabajo que hay en el Juzgado Mixto número 4
de Ceuta por los casos de maltrato”.
Centro de asistencia
Idéntica predisposición mostró con respecto al proyecto de
creación de un centro de asistencia social integral para
mujeres maltratadas en el antiguo chalé de Ybarrola: “He
asegurado al presidente Vivas y a su consejera competente,
Mabel Deu”, relató,
“que el Ministerio de Igualdad estudiará el proyecto para
buscar la fórmula administrativa precisa para hacer posible
vías de colaboración y cofinanciación entre las dos
administraciones que hagan viable ese proyecto, que
consideramos necesario y útil”.
Previamente, en una reunión en la que también estuvo
presente en delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, y
el director general de INJUVE, Gabriel Alconchel, que la
acompañó en su viaje, Aído tuvo la oportunidad de escuchar
en palabras del propio Vivas sus reivindicaciones más
urgentes.
“Cercanía y confianza”
Minutos después, el presidente desgranó ante los medios que
había trasladado a la ministra su agradecimiento por la
“proximidad, cercanía y confianza” que transmiten a los
ceutíes las visitas ministeriales; el “sentir generalizado”
en la sociedad caballa de la necesidad de crear ese juzgado
específico “para contribuir a lograr una igualdad efectiva
entre sexos y a erradicar la lacra del maltrato” y su deseo
de encontrar respaldo económico estatal para crear “un
centro que aglutine los servicios que presta el Centro
Asesor de la Mujer y ponga un acento especial en la atención
a las mujeres víctimas de violencia de género”.
Igualmente, Vivas trató de aprovechar la visita
institucional de la política socialista gaditana para
concienciarla de la necesidad de “colaboración
institucional” en forma de “refuerzo y ampliación de los
programas de inserción y preparación en curso” para atajar
las cifras “peculiares” de desempleo y preparación con que
carga la ciudad, especialmente en dos sectores de su
especial incumbencia como el de las mujeres y el de los
jóvenes.
“Aquí tendrá siempre un apoyo sincero, leal, categórico y
rotundo para ayudarle a tener los mayores éxitos en su
departamento, ya que estos serán también los nuestros”,
cerró su intervención el presidente Vivas.
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Casi un centenenar de salas dedicadas a este asunto en
España
La entrada en vigor del capítulo
penal de la Ley contra la Violencia de Género puso en
funcionamiento 436 juzgados, 22 de ellos exclusivos para la
materia y de nueva creación, con el objetivo de mejorar la
protección de la justicia a las maltratadas y a sus hijos.
Desde entonces, las amenazas leves de un hombre a una mujer,
su pareja o ex pareja, hasta entonces tipificadas como
faltas y castigadas con arresto de fin de semana, se
sancionan como delito, con penas de prisión de seis meses a
un año, o con trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a
80 días. En 2007, el Gobierno creó 42 juzgados más para la
violencia machista, que llegan a 83 [se espera contar con 92
a final de año], y activó un teléfono gratuito con atención
las 24 horas. La Sala encargada de estos asuntos en Ceuta,
no de forma exclusiva, es el Juzgado de Instrucción número
4.
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