Más de medio centenar de personas, entre docentes, padres e
incluso algún que otro alumno, se concentraron ayer a las
puertas del Colegio León Solá, para protestar por la
agresión sufrida por uno de los profesores del centro, por
parte de un alumno de 4º de Primaria. Uno de los fines de la
concentración era llamar la atención a Educación.
Uno de los fines de la concentración de ayer era llamar la
atención a la Administración Educativa para evitar que
vuelva a suceder en el centro un hecho similar.
Y es que para los docentes no es muy lógico que un niño de
segundo ciclo de Primaria se atreva a golpear a su profesor,
máxime cuando, según apuntan, no hubo un detonante que
provocase esta grave agresión; tras la cual el profesor se
encuentra de baja debido a que el golpe le hizo daño en uno
de sus ojos, al por llevar lentes de contacto.
Expulsión
Según informaron ayer algunos de los docentes que se dieron
cita en la concentración, por ahora la única medida acordada
es la expulsión del alumno agresor, aunque esta acción
también podría llegar a la Comisión de Convivencia para
analizar el hecho en profundidad. Para los docentes del León
Solá, esta agresión no puede quedar como un hecho aislado,
sino que se tiene que tomar medidas como actividades donde
concienciar a las familias de la gravedad de ellos así.
Más recursos
Asimismo aprovecharon la concentración para instar a la
Dirección Provincial de Educación a que se pongan más
recursos, técnicos y humanos, a su disposición, ya que como
recuerdan este colegio junto con los CEIP Juan Caro y
Mediterráneo son centros de "difícil desempeño".
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