Contando con José Luis Martínez, quien se da por supuesto
que será expulsado como denunciante contra el partido, ya
son diez los aspirantes a militar en el PSOE de Ceuta que
yan sido oficialmente rechazados: Antonio Gil, Manuel
Calleja, Gonzalo Sanz, Gema Prieto, Rafael Leal, Javier
Martínez, Justino Lara, Francisco Sánchez Mena (el abogado
de UGT-Ceuta) y María Elena Torregrosa (la esposa de Basilio
Fernández). Hoy, salvo que Correos complete su vergüenza y
no sea capaz de repartir en cuatro días cartas urgentes
remitidas desde la propia ciudad, se completará la “purga
estalinista”, según la describió ayer Martínez.
“¿Quién votaría a un partido dirigido por gente como esta?”.
La frase es del que estaba dispuesto a ser candidato
alternativo a José Antonio Carracao si Ferraz y su
silenciosa Comisión Delegada para Ceuta hubiese aceptado el
traslado de su ficha como militante a la Federación ceutí,
Javier Martínez. Después de más de un año de silencio, el
inspector de Educación habló ayer para lamentar y denunciar
el “pésimo ejemplo” que a su juicio está dando Salvador de
la Encina “a toda la sociedad ceutí”. “No sólo vulneran la
Constitución, que establece que nadie puede ser discriminado
por su condición personal, al inadmitir mediante una purga
estaliniana a esposas, amigos, familiares y compañeros de
trabajo de aquellos a quienes consideran malos socialistas”,
apuntó ayer Martínez a este periódico, “sino que además
están haciendo buenos procesos que hace poco tiempo hemos
visto en otros partidos y que los socialistas hemos
criticado duramente y con mucha razón”.
Ayer supieron de cuál era la opinión de la Comisión
Ejecutiva Federal sobre ellos otras dos personas, dos casos
que contribuyeron a agitar el malestar de los denominados
‘críticos’. Fueron los del abogado de UGT-Ceuta, Francisco
Sánchez Mena, más de dos décadas también de militante
socialista, y María Elena Torregrosa, la esposa de Basilio
Fernández. Ellos son, junto a Manuel Calleja, Gema Prieto,
Gonzalo Sanz, Antonio Gil, Justino Lara, Rafael Leal y
Javier Martínez, que para que no se sienta celoso, se
supone, recogerá hoy la carta que le ha remitido también De
la Encina, la segunda después de la que le hizo llegar la
Secretaría de Organización negándole el traslado. Ya sólo
faltan 2 ó 3.
Como Martínez, otro de los que, ayer, rompió también su
silencio fue el profesor Calleja, que no sólo se llevó un
gran disgusto al leer que le ponían en la calle, sino que
también se preguntó “qué piensa hacer Carracao” con el
partido y con los procesos electorales que vendrán en el
futuro.
“Es de suponer, vistos los métodos que utiliza o permite que
se usen a su favor que cuando lleguen los próximos comicios
optará por disolver desde la Delegación del Gobierno al
Partido Popular”, ironizó antes de advertir de que “parece
que Ceuta va a tener que pagar los juegos de ajedrez
político del PSOE de Cádiz”.
Hablando de la provincia vecina y de la trayectoria del
candidato Carracao el colaborador del Grupo Parlamentario
Socialista, de este y del anterior, se preguntó también “qué
confianza tiene en esta ciudad una persona que se ha
asegurado su puesto de trabajo en Algeciras para tener un
salida a mano”.
En ese mismo sentido el secretario general de UGT-Ceuta,
Antonio Gil, quiso ver en lo sucedido durante los últimos
meses la “prueba” de que él y quienes le acompañaban
reclamando un Congreso Extraordinario tenían razón: “Dijimos
que su único interés era pasar las generales para asegurarse
un puesto de trabajo y así ha sido; si no se hubieran
quedado con el partido la mayoría de la Ejecutiva que debe
ganar la Asamblea no tendría otra salida más que el INEM”.
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