El tradicional puente de la Constitución, o de la Inmaculada
[según se mire] ha vuelto a significar el cierre comercial
generalizado en la ciudad autónoma para pesar de los ceutíes
que han permanecido en ‘casa’ en estas minivacaciones
prenavideñas. Pesar de ceutíes y de visitantes [que los ha
habido]. Nada abierto. Ningún comercio de los que flanquean
el más que remozado paseo del Revellín [que nos ha costado a
los ceutíes un ojo de la cara para poner en valor al sector
en el centro], ni nigún otro, salvo esporádicos bazares y
pequeñas tiendas de ultramarinos.
No debemos pues recoger más mensajes de crisis económica en
un sector que se toma vacaciones echando el cierre en días
tan señalados como para dinamizar la vida vacacional de
tanto los que quedan como los que vienen. De nada vale la
excusa de estar forzados por los sindicatos y por un
convenio encorsetado que atenta directamente contra la
continuidad de un sector que siempre fue pieza principal de
la economía de Ceuta.
Mientras que las persianas han formado parte, un año más,
del paisaje en este puente de diciembre, ahí al lado en
Algeciras, la Asociación de Empresarios del centro y el
consistorio velan por dinamizar y activar el comercio
precisamente en días festivos y épocas como ésta.
Sencillamente para hacer frente a los grandes centros
comerciales que rodean el Campo de Gibraltar y la
prevalencia que significa El Corte Inglés [cuya tienda sí
abrió en Ceuta].
De nada valen las campañas de ‘Compren en Ceuta’ cuando con
este tipo de medidas [cierre por vacaciones] el ceutí
aprovecha para, sabiendo lo que históricamente ocurre, salir
a la península y aprovechar la múltiple oferta existente al
otro lado del Estrecho. Eso para los que pueden salir ¿pero
y los que quedan en casa?. Para estos, sólo la ‘tienda de la
esquina’ les ha ‘salvado’ la situación. Absolutamente
penoso. La ‘crisis’ se agrava en momentos como éstos en
tanto que los más de 9.000 residentes ceutíes han podido
desprenderse, según cálculos a bote pronto, de más de
300.000 euros allende de nuestras fronteras geográficas. Un
dinero que no circulará por Ceuta y que se sumará al
circulante del sur peninsular porque aquí somos así de
dadivosos [ya llegarán los dineros de las múltiples
subvenciones que se reciben para economía improductiva]. Lo
lamentable es comproba cómo la financiada [con dinero
público] campaña publicitaria ‘Ceuta, ciudad de compras’
lanzada por el también financiado con dinero de todos los
ceutíes ‘Centro Comercial Abierto’ ha permanecido cerrado a
cal y canto en un paseo que les ha revalorizado la zona
[también con dinero de todos]. ¿Dónde está la inciativa?.
¿Dónde queda el compromiso para con la ciudad?. ¿Cuándo
podremos escuchar, a la limón, a empresarios y sindicatos
aquello de ‘qué podemos hacer por Ceuta’, en lugar de
esperar siempre eso otro de ‘qué nos puede dar Ceuta a
nosotros’?. ¿Está Ceuta en crisis?. ¿Sí?. Desde luego no
parece que lo esté en el sector comercial. No les ha hecho
falta abrir en este puente. Las instituciones no deben
hallar la fórmula para la reactivación de la economía en el
sector terciario. Entre otras cuestiones por el inmovilismo
de estos y la falta de coraje para ofrecer un servicio capaz
de enfrentarse a la tentación del consumidor por acudir a
los grandes centros comerciales del sur peninsular.¿Qué
ofrecemos en Ceuta cuando llegan fechas como éstas?. Lo
habitual es echar las persianas, cerrar y volver a abrir
siempre en horarios de oficina. Es la vida al revés. La
ciudad se está convirtiendo tan funcionarial que la
iniciativa privada no sólo no es capaz de romper esa
tendencia, sino que además se adapta a ese estilo de vida
dando la espalda al resto de la sociedad que no lo es.
|