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Me invitan asistir a una Bienal de
Cine y Teatro pero no puedo acudir. No tengo donde dejar a
mi hijo pequeño y como lo conozco bien, sería imprudente
meterlo en una sala de reducidas dimensiones. Capaz es de
subirse al escenario.
Esto se llama “saber estar” lo contrario de la postura de
los peperos madrileños que rozan el ridículo.
Que el presidente de la Federación Española de Municipios y
Provincias (FEMP) diga, en el transcurso de un debate
político en un sitio pequeño y además como expresión
coloquial “¿Por qué hay tanto tonto de cojones que todavía
vota a la derecha?” y luego rectifique por ser declaraciones
desafortunadas y pidiendo perdón, no es tanto como para el
jaleo que están montando los peperos.
Se ve que los del PP piensan haber encontrado un filón para
arremeter con fuerza contra el PSOE, sin tener en cuenta que
es la exclamación de un alcalde de una ciudad madrileña,
Getafe, y que lo dijo en un pronto. Además en ningún momento
dijo nada del PP, sólo de derechas, como si dijera de
extrema derecha.
Todo este rifirrafe montado por los conservadores no es más
que un intento por causar una mayor erosión de los gobiernos
autónomos y sus municipios dado que las declaraciones del
alcalde getafeño no deberían tener mayores consecuencias,
máxime que se circunscribe a una sola Comunidad.
Las palabras de Gallardón, claras que no necesitan
iluminación alguna, con las que aceptó parte de las
disculpas del edil socialista yaseguró que Madrid se podría
plantear la salida de la FEMP, pero por otras cuestiones,
por la propia situación de la entidad municipal y no por los
“improperios” de su presidente, indican que existe una
eterna situación de no saber estar. Que salgan de una
institución que ellos mismos forzaron a fundarla no indica
más que cobardía ante la situación o situaciones creadas.
Con lo sencillo que es, si hubieran puesto una moción de
censura en la Asamblea de dicho organismo, se habría
resuelto el polémico problema de unas declaraciones fuera de
contexto.
Tal como han llevado los del PP las cosas, los socialistas
apoyarán al alcalde en una respuesta clara al ataque global
que hacen los peperos contra los socialistas. Usan al
individuo para atacar al conjunto de individuos.
Esas declaraciones desafortunadas la declararon, con otras
palabras, mucho antes y con bastante frecuencia los propios
peperos (en la calle, en el Congreso, en el Senado, en el
bar de la esquina…) y como muestra el botón que la propia
presidenta de la Comunidad de Madrid puso en bandeja a la
prensa nacional con esa denominación de “bellacos” a los que
la criticaron por ciertos aspectos y actitudes en el viaje a
Bombay. ¡¡Que cinismo elevado al cuadrado presentan los del
PP!!
No saben estar. Ni en política ni en su entorno particular.
No saben estar cuando las cosas se les tuercen
desfavorablemente y ello describe muy a las claras el
talante de este partido político que tiene la inmensa suerte
de participar en una España tolerante, cuando ellos son
intolerantes; en una España democrática, cuando ellos son
liberales totalitarios; en una España transigente, cuando
ellos son totalmente intransigentes, hasta consigo mismos;
en una España constitucional, creada por los antecesores de
esos políticos peperos (entonces con otras siglas) a su modo
de ver la pseudo democracia que comprenden los artículos de
la Carta Magna.
La intransigente postura del PP de no tocar ni un huevo,
perdón, ni un punto de la Constitución (que por otra parte
ya es un poco obsoleta) habla a las claras que aún tienen la
esperanza encendida de un futuro como a ellos solos le
gusta. Futuro con una democracia en su mínima expresión.
Ahora esperemos a ver qué polémica se levantará de aquí a
unos días, cuando abra sus puertas el Congreso, sobre las
declaraciones del diputado de ERC, Joan Tardà, al proclamar
“viva la República, muerte al Borbón”.
Ignoro si sabrán sus señorías que Tardà se refería a una
frase histórica que se gritaba en la guerra de Sucesión
contra Felipe V, el primer Borbón en España.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
