Desde el año 1997, coincidiendo
con el día 3 de diciembre, el Comité Español de
Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), la
plataforma asociativa unitaria de representación, acción y
defensa de las mujeres y hombres con discapacidad y sus
familias en España, se une a las Naciones Unidas (ONU) y al
Foro Europeo de las Discapacidad (EDF), para celebrar el Día
Internacional y Europeo de las Personas con Discapacidad,
promovido por las ONU desde 1992. Con este motivo, los
ciudadanos y ciudadanas con discapacidad recuerdan y
reclaman a los poderes públicos y a la sociedad en su
conjunto la necesidad de adoptar medidas transformadoras que
garanticen la igualdad de trato y oportunidades y acaben con
las discriminaciones de toda índole que todavía sufre este
grupo social. En Ceuta, la labor del CERMI es encomiable. Si
bien desearían que las instituciones estuvieran más encima
[a veces no todo es dinero], el proceso regulador, la
coordinación y la labor de canalización que realiza el
Comité Español de Representantes de Personas con
Discapacidad es sencillamente ejemplar. Hoy, precisamente
cuando se conmemora el Día Internacional de la Discapacidad,
en Ceuta podemos echar un vistazo sencillo por las
complicaciones que atraviesan aquellas personas que, de un
modo u otro, les ha tocado vivir con una dificultad ya sea
física, psíquica o sensorial. Ponernos en su lugar, por un
momento, nos puede hacer comprender el esfuerzo inmenso que
estas personas realizan para intentar resistir en esta
sociedad tan, a veces impersonal, y que no siempre se
preocupa por cómo lo pasan los demás. El Gobierno de la
Ciudad tiene contemplados medidas interesantes en 2009 para
la eliminación de barreras arquitectónicas y anuncia que con
el Plan Estatal nuevo dedicará algo más de un millón de
euros en este nuevo año que se avecina a facilitar las cosas
a los ceutíes con discapacidad. Hablar con el CERMI sería lo
conveniente, ellos son la voz de los discapacitados ceutíes
y los que saben qué se puede mejorar verdaderamente.
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