El portavoz de la Ciudad Autónoma de Melilla, Daniel Conesa,
acusó ayer al delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, de
actuar con “sectarismo” y “como un mandado” del secretario
general del Partido Socialista (PSME-PSOE), Dionisio Muñoz,
por lo que le ha advertido de que esta actitud “va a
conducir a problemas de relación” entre ambas instituciones.
En rueda de prensa, Conesa consideró que Escobar “ha
demostrado con creces que el cargo de delegado del Gobierno
se le ha quedado grande” debido a que “no hace nada y
permanece callado durante días en situaciones en que se
requiere que dé la cara”. Además, Conesa criticó que Escobar
“sigue los dictados al dedillo” de Muñoz, lo que ha
atribuido a que “quizá no tiene capacidad para separarse de
esa política de oposición destructiva del PSOE”.
“Escobar le debe todo a Muñoz, como ser candidato [a las
elecciones generales de este año] y ser delegado del
Gobierno”, continuó diciendo el portavoz de la Ciudad
Autónoma, quien le pidió que no se limite sólo a “despachar
papeles para mandar a Madrid”.
Visita de la ministra
Asimismo, Conesa tachó al delegado del Gobierno de
“mentiroso” por decir que el programa de la visita de la
ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, se coordinó
previamente con la Ciudad Autónoma, en contra de lo que esta
institución mantiene.
El portavoz del Gobierno local aseguró que el presidente de
la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda se enteró de que había
sido convocado al acto de la firma del convenio a través de
una convocatoria de prensa que vio en su visita a una
emisora de radio, mientras que el consejero de Fomento,
Rafael Marín, tuvo que telefonear personalmente a la
Delegación del Gobierno para informarse de la hora de la
Comisión Bilateral.
En cambio, Conesa afirmó que en la visita de la ministra de
Vivienda a Ceuta se remitió un fax con una convocatoria
oficial al consejero de Hacienda e Infraestructuras del
Gobierno de esa ciudad, algo que no ocurrió en el caso de
Melilla. “¿Por qué no hicieron eso aquí también?”, se
preguntó Conesa.
Terrenos para las 600 VPO
Asimismo, el portavoz insistió en que “también es mentira”
que el Gobierno melillense no haya ofrecido terrenos para la
construcción de 600 viviendas sociales por parte del Estado,
tal y como han asegurado algunos dirigentes del PSME-PSOE,
como Dionisio Muñoz o su número dos, Alonso Díaz, a los que
Conesa puntualizó que “hemos ofrecido terrenos, pero al
Ministerio no le gustan”.
Ante esta situación, Conesa sugirió al Gobierno central que
aporte sus propios terrenos para ejecutar el convenio de
vivienda, dado que este acuerdo también contempla esa
posibilidad. Según Conesa, en el convenio de vivienda de
Melilla se afirma que el suelo para las 600 VPO “serán
aportados por la Ciudad Autónoma o por el Estado conforme a
la disponibilidad de terrenos”. Para ello, el portavoz
sugirió al Gobierno central que “si no tiene terrenos, los
compre de acuerdo a su convocatoria nacional de 300
millones”.
En cualquier caso, Conesa advirtió de que la Ciudad Autónoma
“no va a tolerar” que se construyan las 600 VPO en el solar
del antiguo Acuartelamiento de Santiago, tal y como pretende
el Ministerio de Vivienda, ya que “eso es una bestialidad
urbanística y social” y, además, corresponde a “un modelo
urbanístico de la época del franquismo”.
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