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En lo que va de año un total de 29 mujeres víctimas de malos
tratos, frente a las 33 de 2007, se benefician de la Renta
Activa de Inserción (RAI), una prestación económica de 413
euros con la que el Estado busca ayudar a estas mujeres a
rehacer sus vidas, según informaron ayer Antonio Espínola,
responsable de la Unidad de Coordinación contra la Violencia
de Género de la Delegación del Gobierno y Joaquín Aranda,
director territorial del SPEE. Las demandantes de esta
prestación deben demostrar documentalmente que son víctimas
de violencia doméstica.
Los datos aportados por Joaquín Arana (SPEE) y Antonio
Espínola, de la Unidad de Coordinación contra la Violencia
de Género de la Delegación del Gobierno, apuntan en lo que
va de año un total de 29 mujeres víctimas de malos tratos,
frente a las 33 del pasado año, son preceptoras de
prestaciones económicas por violencia de género en nuestra
ciudad, en concreto de la RAI, Renta Activa de Inserción,
por el que perciben, tras la actualización correspondiente,
una ayuda mensual de 413,52 euros, frente a los 399 del año
2007. Esta actualización en la prestación ha supuesto que la
partida anual supere ya los 131.900 euros, cuando en el
pasado ejercicio el total fue de 118.000 euros. Del total de
beneficiarias de este año, cinco se han insertado en el
mercado laboral. La Renta Activa de Inserción (RAI) es un
programa anual gestionado por el INEM-SPEE de apoyo a la
inserción laboral de colectivos con especiales dificultades
para incorporarse al mercado de trabajo y en situación de
necesidad económica, que conlleva tanto una prestación
económica mensual como asesoramiento individualizado. El
colectivo de mujeres maltratadas es uno de los beneficiarios
de este programa.
Esta prestación sólo se puede recibir durante once meses y
se comienza a percibir un mes después desde la fecha de
solicitud, aunque en el caso de las víctimas con órdenes de
protección la ayuda la reciben desde el día siguiente a la
solicitud, que debe formularse en la Oficina de Empleo. La
cuantía de la renta es actualmente de 413 euros al mes.
Asimismo se prevé que las víctimas de malos tratos que se
vean obligada a cambiar de residencia recibirán una ayuda de
1.300 euros. Este año han recibido esta ayuda un total de
cuatro mujeres Si la mujer victima de violencia de género y
preceptora de la RAI se coloca a tiempo parcial, cobrará la
mitad de la renta de forma suplementaria a lo que ya percibe
y, además, durante el doble de tiempo que le quede por
percibir. Es decir, si una mujer se coloca a media jornada y
le quedan 6 meses por cobrar esta ayuda, pasará a percibir
la mitad de la cuantía, pero no ya por 6 meses sino por 12
meses. Si durante la percepción de este programa la
beneficiaria comienza a trabajar como autónoma o se coloca
por cuenta ajena a tiempo completo se suspenderá el pago de
la renta y tendrá derecho a una ayuda equivalente al 25% de
la cuantía de la misma durante un periodo de 180 días.
Además si finaliza el trabajo por cuenta ajena con una
duración inferior a 6 meses, no tendrá por qué solicitar la
reincorporación al Programa RAI, dado que el SPEE le
reanudará de oficio el pago siempre que figure inscrito como
demandante de empleo.
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violencia de género
