Creo que fue un domingo de
octubre, no lo recuerdo muy bien, cuando en la miscelánea
semanal escribí que me gustaba cómo conducía ‘El Paseo’, un
programa de Radio Televisión Ceuta, Beatriz Palomo. Y
aclaraba que mi critica favorable se producía tras haber
visto dos programas por pura casualidad.
Es decir, porque mi llegada a la barra de la cafetería del
Hotel Parador La Muralla coincidió con que en ese momento el
televisor –me gusta más decir la televisión. En lo que estoy
de acuerdo con Alfonso Ussía- tenía puesto el canal
que maneja Manuel González Bolorino. Y en el cual
parece que pinta muy poco el presidente del Consejo de
Administración, Jaime Wahnon.
Sea como fuere, a mí no me costó el menor esfuerzo reconocer
una labor bien hecha por una profesional estupenda y cuyos
muchos años en el oficio le están permitiendo mostrarnos lo
mejor de ella. Y, desde luego, tampoco buscaba al destacar
su actuación que ni Beatriz ni nadie del medio me llamara
para agradecerme el escrito laudatorio.
Con lo cual se demuestra que nada tengo en contra de esa
televisión pública, si acaso no ha cambiado la situación
desde octubre. Pero ello no es impedimento para que también
pueda escribir sobre lo que no me gusta. Aunque si me privo
de hacerlo es porque apenas me siento ante el televisor. Y
cuando doy ese paso, pocas veces, no me da por enchufarme a
RTVCE; salvo cuando se emiten los partidos del primer equipo
local.
Pero el gerente de este medio me recordó que José Enrique
Díaz estaba invitado a ‘El silbato’, un programa
deportivo de los lunes, y entonces me pudo la curiosidad por
saber qué diría el director técnico de la ADC. El hecho
ocurrió a principios de noviembre y confieso que hube de
recurrir a mi voluntad y espíritu de sacrificio para poder
soportar íntegramente, algo que terminé calificando de
bodrio.
Sí, voy a reiterarme en lo dicho entonces: ‘El silbato’ es
un programa de ínfima calidad en todos los aspectos. Y lo
lamentable es que sea tan malo disponiendo la televisión
pública de muchas posibilidades para evitar que semejante
producto sea fiel exponente de las cosas mal hechas por el
desconocimiento del fútbol que tienen todos los que lo
hacen. Y además de hacerlo mal, rematadamente mal, han dado
pruebas evidentes de no saber encajar las críticas
desfavorables.
Me explico: me han puesto al tanto, con aportación de
pruebas, que a partir del día en el cual expresé mi opinión
acerca de ‘El silbato’, han dado en la manía los
profesionales (!) del bodrio de tomar represalias contra ‘El
Pueblo de Ceuta’.
-¿Cómo dice usted?...
Represalias; tal y como ha oído. Verá... Los profesionales
(!!) de la televisión pública acostumbran, cuando van
llegando al tramo final de tan esperpéntico programa, a leer
los titulares de todas las crónicas publicadas por los
medios escritos del lugar donde haya jugado la ADC. También
los correspondientes a Ceuta. Los cuales acaparan todo el
protagonismo cuando el equipo actúa en el Murube. Pues bien,
la venganza ha consistido en secuestrar el titular de este
periódico. Con el beneplácito de González Bolorino: quien no
se cansa de airear que manda tela marinera. Y de Jaime
Wahnon.
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