Llevo a mi chico al colegio, hoy
hace buen tiempo, que está a cien metros de mi casa. La
directora sale a mi encuentro y me indica que hoy están en
huelga los profesores a causa de la nueva Ley de Educación.
Menos mal que salen al paso profesoras y profesores del
colegio que me comunican que ellos no respaldan la huelga.
Pregunto a la responsable del aula donde estudia mi pequeño
por el motivo de la misma, ya que no creo que sea solamente
por la ley. Me responde que al principio creían los
profesores que se trataba de la remuneración mensual, pero
cuando los sindicatos les indicaron que era una movilización
más política que otra cosa, desistieron de apoyarla.
Se trata de una nueva Ley de Educación catalana que se está
tramitando en el Parlament de Catalunya. Obvio es que no
afecta al resto de Comunidades.
Los profesores querían pedir más dinero, no respaldar una
movilización contra una Ley que aprobarán de todas formas
los diputados parlamentarios, a excepción como siempre del
PP.
Pedir dinero como y por lo que sea ya es una costumbre que
se está extendiendo al ámbito privado.
Centrándonos en el tema económico, ahora viene los de la
empresa Nissan, varios amigos míos trabajan en ella, que
está iniciando un expediente de regulación de empleo (ERE)
por causa de la inviabilidad del plan de producción marcado
por los japoneses.
Lo que ya es el colmo de la desfachatez de los empresarios
del sector del automóvil, los de Nissan han recibido un
tirón de orejas del Presidente de la Generalitat, José
Montilla, sobre el uso de tretas para despedir a los
trabajadores, es la intención de que el Gobierno del país
asuma la crisis como propia y los trate con las misma
condiciones que a los bancos.
Los de la asociación automovilística ahora instan al
Gobierno a que se reúna con ellos y que Rodríguez Zapatero
coja el toro por los cuernos para resolver la crisis
galopante del sector…
Por pedir dinero que no quede, ahora quisiera que el
Gobierno me ayude a solventar la crisis de mi gabinete de
arquitectura. Que el dinero que entregue para pagar las
hipotecas de los clientes lo entregue directamente a mi
tesorero…
Bueno, éste último párrafo es una auténtica tontería, lo se,
pero ello es un indicador de hasta dónde ha llegado el
interés de unos empresarios particulares con sus intenciones
de involucrar al Gobierno en sus tejemanejes… ¿No existe en
la contabilidad empresarial una partida de previsión de
fondos para imprevistos? Por lo que se ve, esa partida está
asignada al Gobierno. ¡¡Vaya cuestión de piratas!!
Si por mí fuera, en estos tiempos de crisis, zanjaría el
asunto nacionalizando las empresas automovilísticas bajo el
nombre de Hispania Automóvil. Todos trabajando para el país.
Pero de seguro que me tacharían inmediatamente de comunista
y lejos estoy, muy lejos, de serlo.
Volviendo al tema del colegio, ya es bastante lastimoso que
se vayan cuarteando los valores educacionales de los
españoles que solo conducen a un fuerte fracaso de la
política educacional. Mi opinión es que el tema de la
educación lo lleve un solo ente centralizado y a partir de
ahí se puede usar en las autonomías con lengua propia. No
estoy de acuerdo en que cada autonomía invente su propio
plan de educación que sólo conduce a liar a los pequeños con
temas que en otras comunidades no entran. Mi chico ya anda
bastante liado con los “valores” que enseñan en Ceuta y la
educación que recibe en Catalunya. Aunque a decir verdad,
aquí en la tierra del cava y la butifarra, ya sabe escribir
cosa que no le enseñaron en Ceuta, como tampoco le enseñaron
a sumar y restar cuando aquí en Catalunya niños de tres años
ya saben contar, de cuatro años ya saben restar y de cinco
años ya saben multiplicar.
En fin, no me quiero meter a petulante con eso de la
enseñanza, ya existen profesionales para ello, pero ya
estamos bastante hartos de que confundan derechos con
egoísmo puro y duro. Una cosa es manifestarse por una
educación mejor… no para que le agarren el toro por los
cuernos.
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