Unos vecinos avisaron a la Ciudad por el hallazgo de unos
huesos en una mezcla de zona ajardinada y descampado de la
calle Molino. Cultura encargó a la empresa Arquotectura que
revisara la zona y desde el lunes se ha podido descubrir dos
estructuras mortuarias con algunos huesos orientados hacia
la Meca, por lo que se deduce que pertenecen a época árabe.
El arqueólogo encargado del estudio, Alfonso Palomo, evaluó
que “los restos no carecen de interés” a pesar de la falta
de datación.
Un cúbito lateral derecho enfocado hacia el Este,
dirigiéndose hacia la Meca, ha servido para aproximar los
hallazgos encontrados en un jardín de la calle Molino a la
época árabe. Se ha encontrado dos estructuras mortuorias,
dos cuerpos completos de dos mujeres jóvenes de entre 18 y
25 años y los restos diseminados de dos cuerpos más.
La datación no ha podido ir más allá del encuadre en época
árabe, “normalmente conocemos las fechas a través de las
cerámicas encontradas asociadas a los enterramientos pero no
hemos hallado nada”, explicó el arqueólogo que ha dirigido
las excavaciones, Alfonso Palomo. El único elemento
fabricado que se ha hallado cerca de las tumbas ha sido un
clavo, además de cerámicas de la época actual y los restos
de una botella del siglo XVIII que parecen no tener ningún
tipo de conexión con las tumbas. Además será imposible
utilizar la técnica del carbono 14 para poder asignar una
fecha ya que los huesos se encuentran en mal estado de
conservación.
Los vecinos avisaron a la Ciudad de la aparición de restos
humanos en esa zona. Desde el lunes, la empresa privada
Arqueotectura ha estado haciendo excavaciones en el jardín,
que será remodelado en breve. “La verdad es que los
resultados son buenos y y no carece de interés por lo que
estamos bastante satisfechos”. Los trabajos concluyeron ayer
tras la recogida de los enseres utilizados, aunque no se
descarta que la zona contenga más hallazgos.
Los cementerios árabes suelen aparecer a las afueras de las
urbes, “esto es a nivel general, hay casos en los que este
tipo de necrópolis se encontraban en la parte interior de la
ciudad”.
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