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La Consejería de Sanidad de la Ciudad Autónoma destinará los
60.000 euros que el Estado le ha transferido en concepto de
propiedades expropiadas al narcotráfico a tres programas
distintos dedicados a la lucha contra la drogadicción y más
concretamente a la adicción a la cocaína. Según explicó ayer
la portavoz gubernamental, Yolanda Bel, esta partida servirá
para financiar un curso de formación dirigido a padres y
madres de alumnos para prevenir el consumo del polvo blanco.
Otro programa se dedicará específicamente a la
rehabilitación de consumidores y un tercero, a reforzar los
proyectos ya en marcha de reinserción socio-laboral de
dependientes.
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droga
