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Tal y como viene haciendo durante las últimas semanas, el
presidente de la UDCE, Mohamed Ali, volvió a advertir ayer
al PP de que “no podrá callarme la boca” después de que ayer
el partido que dirige Pedro Gordillo informase de que la
querella criminal por injurias y calumnias que el director
del ICD, Víctor Íñiguez, le presentó por decir en televisón
que había “metido la mano en la caja” durante la campaña de
2007 sigue su trámite judicial y no ha sido sobreseída, algo
que Ali también negó.
“La Audiencia ha admitido a trámite el recurso de queja del
PP sobre la desestimación en el Juzgado de Instrucción
número 2 de un anterior recurso de reforma en relación con
el sobreseimiento de la querella, es cierto, como también lo
es que aún no ha dictaminado sobre el fondo del asunto”,
explicó Ali, que para no perderse en la maraña jurídica
resumió que “lo más que puede hacer la Audiencia es ordenar
al juzgado que admita el recurso contra el sobreseimiento de
la causa”.
Sobre el fondo político del asunto el líder de UDCE volvió a
acusar al PP de intentar “cercenar” el derecho de la
oposición “a criticar lo que nos parece inaceptable”. “Lo de
Íñiguez, que cobró un dinero en trienios con el único aval
de un funcionario que no era el Interventor, ni mucho menos,
era tan importante que la gente tenía que saberlo,
especialmente en campaña, cuando se hace balance, porque
además la Administración tuvo que elaborar un expediente al
respecto”.
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