Para que los sueños se hagan realidad, lo primero que hace
falta es creer en ellos. Y luego, a partir de ahí,
perseguirlos hasta atraparlos, para no dejarlos escapar.
Justo en el punto en el que se halla Hakim, una de las
promesas de la cantera, que se ha visto entrenando con el
primer equipo de la noche a la mañana. Así, el pasado martes
empezó a entrenar el pasado martes, una vez que Manu León,
técnico del Goyu Ryu, le comunicara a su pupilo una noticia
por la que, como no podía ser de otro modo, está “muy
contento”.
Una experiencia de la que guarda muy buen recuerdo,
relatando que “me saludaron todos los compañeros”. Quedando
patente, cuando “se presentaron uno por uno”, que hay “buen
rollo” en el vestuario. Justo antes de dividirse para
disputar ´partidillos´ a mitad de campo y situarse en el
lateral izquierdo. Reconociendo que “todavía me tengo que
asentar un poquito” aunque, para ser el primer día, es
normal que estuviera “un poquito verde”.
Sin duda un gran estímulo para este canterano que entiende
como “un privilegio” entrenar en el primer equipo de la
ciudad. Más si cabe cuando el Goyu Ryu de División de Honor
está dividido entre Ceuta, Málaga y Sevilla y “de aquí
apenas somos cuatro”. Por lo que las sesiones suelen ser un
tanto atípicas para el conjunto amarillo.
Ahora, su próximo objetivo, será debutar con el equipo de
Segunda B. Algo que “para mi sería un honor”, siguiendo los
pasos de otros como Munir, Alfredo, Villatoro o Antonio
Prieto.
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Su segunda campaña en el Goyu Ryu
Esta campaña está siendo su
segunda experiencia en el Gimnasio Goyu Ryu a las órdenes de
Manu León, del que ha llegado a ganarse su confianza,
convirtiéndose en uno de los fijos del conjunto amarillo.
Eso tras haber jugado en el Ceuta de Liga Nacional juvenil
hace dos campañas, a las órdenes del Rafa Salcedo. Un
futbolista que destaca por su polivalencia, ya que ha jugado
en ambos laterales de la defensa, en el centro del campo
también en ambos puestos, e incluso, en alguna ocasión como
hombre más adelantado
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