Sobre las diez y media de esta mañana, S.J., hijo del
diplomático marroquí en Estados Unidos y su acompañante, se
sentarán frente al Juzgado de Primera Instancia e
Instrucción número 3 de Ceuta para prestar las primeras
declaraciones sobre lo ocurrido en su visita a la ciudad
autónoma. En su denuncia, las dos supuestas víctimas
acusaron a los agentes de la Jefatura Superior de Policia de
malos tratos aunque el magistrado que lleva el caso ha
calificado los hechos como una falta y no como un delito,
tras examinar las pruebas testificales aportadas y las
grabaciones que fueron aportadas por el cuerpo de seguridad
del interior de los calabozos donde estuvieron retenidos los
dos marroquíes. En las grabaciones, al parecer, no se
aprecian ni los supuestos golpes ni las recriminaciones que
fueron denunciadas inicialmente por el hijo del diplomático.
También acudirán a la vista oral varios agentes de la
Policía Nacional en calidad de testigos, que esclarecerán la
actuación de los policías destinados en el puerto hacia
ambos afectados que, días después, denunciaron y amenazaron
con la generación de un conflicto diplomático. Sólo cabe
esperar que se desarrolle la cita para conocer el destino
final de esta trama acontecida en el mes de julio y en la
que actuan como protagonistas los cuerpos de seguridad de
Ceuta y el hijo de un diplomático, ni más ni menos.
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