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cultura - SÁBADO, 25 DE OCTUBRE DE 2008


equipo de la Universidad de Cádiz. cedida

arqueología
 

La excavación progresa en el estudio de Benzú hace 150.000 años

Eduardo Vijande y Juan Jesús Cantillo preparan dos tesis sobre el Neolítico y los recursos marítimos respectivamente
 

CEUTA
Fernando M. Caracena

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Las nuevas excavaciones organizadas en la cueva y el abrigo de Benzú por el grupo de profesores de la Universidad de Cádiz se centra ahora en el estudio del llamado nivel 5 que recoge registros de hace más de 150.000 años. Entre los hallazgos destaca una punta musteriense en perfecto estado de conservación. Dos miembros de la Universidad preparan dos tesis sobre el yacimiento.

La nueva campaña de excavaciones en el yacimiento de la cueva y el abrigo de Benzú progresan estos días en los registros del llamado nivel 5 A que recogen una cronología que ronda entre los 160.000 y los 175.000 años de antigüedad. “Al encontrarse en la parte superior del pleistoceno medio se pueden datar las piezas que encontramos con una precisión bastante aceptable”, explicó el director y profesor titular de Prehistoria de la Universidad de Cádiz. De esa época destaca el hallazgo una punta musteriense perfectamente conservada que se utilizaba para tratar la carne. También se está trabajando en el nivel 3 B del abrigo, ligeramente más antiguo que el anterior.

El objeto de la nueva campaña es conocer los registros más antiguos de la secuencia del abrigo, que alcanzan hasta los 300.000 años. Una fecha similar a la época en la que se trabaja en el conocido yacimiento de Atapuerca. Además se quiere precisar la tecnología encontrada en los niveles 4 al 1 y se trata de interpretar el cambio tecnológico encontrado entre los niveles 2 y 1.

El abrigo y la cueva de Benzú están siendo estudiados por un amplio equipo multidisciplinar. Se ha extraído una nueva columna de piedra para analizar el polen de su interior que está siendo estudiada por Blanca Ruiz y María José Gil de la Universidad de Alcalá de Henares. Para completar el estudio de la flora de aquella época se cuenta con el análisis antrocológico desarrollado por la profesora de la Universidad a Distancia Paloma Uzquiano. También se han emprendido nuevos estudios geomorfológicos en colaboración con un equipo de la Universidad de Huelva y sobre la fauna del pleistoceno. Los hallazgos encontrados están siendo analizados por el laboratorio que el equipo de excavación ha montado en el colegio Ortega y Gasset.

Se está preparando una monografía “potente” sobre el yacimiento de Benzú. Eduardo Vijande prepara un estudio sobre el Neolítico en Benzú y su contexto en el entorno del estrecho de Gibraltar. La tesis de Juan Jesús Cantillo versará sobre los recursos marinos de Benzú y su influencia en los modos de vida de los grupos humanos que habitaron Benzú.

El punto de vista desde el que se está analizando la tecnología encontrada es su función con los productos que manejaban las poblaciones de cazadores-recolectores de Benzú y su proyección como resultado de las organizaciones sociales de los grupos.

Cuando se le pregunta a José Ramos por el hallazgo óseo, el profesor de la Universidad de Cádiz se ríe. Los materiales encontrados son muy similares a las producciones líticas que se encuentran en el sur de Europa procedentes de poblaciones de neandertales, también son anteriores. Un hueso podría cambiar la teoría de la ruta seguida por los neandertales para alcanzar Europa situando la puerta de entrada en el Sur en vez del Este. Un reciente estudio de la Universidad de Bristol fija que en el último periodo interglaciar (hace entre 130.00 y 170.000 años) el norte de África era más húmedo de lo que se pensaba y había más corredores verdes que accedían a la costa que el valle del Nilo.

La principal dificultad del yacimiento es la dureza y la complicación en el trabajo de unos sedimentos formados en condiciones de frío y humedad. El equipo que trabaja en Benzú ha tenido que idear nuevas herramientas y se utilizan procedimientos poco habituales. Estas dificultades se trasladan también al laboratorio en don se deben usar microprensadores y utillaje específico especializado junto a ácidos y cubetas de ultrasonidos.
 

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