El Juez Decano de Ceuta, Juan Domínguez-Berrueta, explicó
que la Junta convocada el pasado miércoles fue espontánea y
suscitada por el órgano de Cádiz. Además advirtió que la
espera de la respuesta política a las reivindicaciones se
realizará “con paciencia”0 pero “nada será suficiente
mientras no haya un desarrollo orgánico y legislativo
interior”.
El movimiento que se organizó el pasado miércoles partió de
los jueces de Cádiz y se expandió al territorio nacional.
Fue espontáneo pero un 90% de los organismos judiciales se
reunieron. En la cita de Ceuta no se estudió el caso del
juez Tirado pero aprovechándolo “reflexionamos en que no se
puede pretender una sanción de un juez y que el poder
político, en su exceso, sea el que lo decida y no el poder
judicial”.
Según explicó el Magistrado Juez Decano de los de Ceuta,
Juan Domínguez-Berrueta y De Juan, “hace cuatro o cinco
años, en el Pacto para la Justicia, plasmamos en una ley
orgánica la necesidad de un desarrollo legislativo que
empezó muy bien pero se ha paralizado”. En cuanto a la
respuesta por parte del poder político de la nación,
“esperamos pero hasta que no se declare la voluntad
política, no se podrá poner nada en marcha. Aquí en Ceuta se
ha intentado implantar la oficina judicial y se han
organizado algunas plantas pero nada será suficiente
mientras no haya un desarrollo orgánico y legislativo
interior”, concretó Domínguez Berrueta. La necesidad de la
oficina judicial, de personal cualificado y de redes
informáticas se hace cada vez más evidente, ”pero somos
conscientes de que es más difícil ahora por la crisis
económica. Aún así se trata más de un procedimiento
orgánico; así que paciencia”, sintetizó el Juez Decano.
Referente a esas medidas legítimas que se procederán en caso
de no obtener una respuesta urgente, “no nos podemos mover
más que del ámbito legal. Hemos dejado clara nuestra postura
a través de este movimiento espontáneo. Hemos minimizado al
máximo nuestros esfuerzos y no queremos deteriorar el
funcionamiento público” confesó el magistrado. Aún así, “a
priori no podemos sindicarnos ni ponernos en huelga según
dicta la ley”, concluyó.
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