Villajovita, una de las barriadas con más tradición del
campo exterior en Ceuta, pretende recuperar su esplendor y
protagonismo en la ciudad. Después de varios años donde la
Asociación Vecinal apenas ha estado activa, una nueva junta
directiva se hará cargo de todo lo concerniente a este
lugar. Su presidente, Alfonso Ros, lo tiene claro: “Vamos a
muerte”. Erradicar la delincuencia, promover el deporte,
conseguir un local social nuevo y cambiar el sentido de
circulación de una calle son algunas ideas.
El nombre de la barriada de Villajovita volverá a estar
entre los más sonados de la ciudad. Eso es lo que pretende
la nueva junta directiva de esta Asociación de Vecinos (A.VV.).
Tras unos años en los que la presidenta Zoraida García ha
estado sola al frente de los problemas vecinales, un grupo
de personas se ha decidido a dar un vuelco a la situación.
“Existen muchos problemas que solucionar y vamos a ir paso a
paso, pero vamos a ir a muerte”, aclaró el nuevo presidente
de la A.VV., Alfonso Ros. Éste, acompañado de una nutrida
junta directiva, espera, como primera medida, que se
erradique la delincuencia. Existe un brote de robos tanto a
casas como a vecinos. “Las mujeres vienen de hacer la compra
en Eroski y tienen miedo al pasar por la escalerilla -la de
Ruiz de Alarcón- porque ya han atracado a más de una”,
comentó Ros. “Pedimos que la Policía pase con más
frecuencia, sobre todo por la noche”, explicó.
Según los vecinos, una pandilla de chavales con perros
pitbull visita la barriada por las noches, precisamente en
la escalerilla. “Han aparecido gatos muertos por la mañana y
metidos en bolsas”. Una de las medidas urgentes para evitar
que se produzcan estos hechos radica en cambiar las pastas
que recubren las bombillas de las farolas, ya que son
oscuras e impiden la iluminación. Además, dicen que la
luminaria debería aumentar.
En cuanto al deporte y al ocio, la junta también lo tiene
claro. Quieren conseguir la cesión del patio del colegio de
internado de menores. “Hay muy pocos niños allí; se podría
aprovechar el patio que tienen para hacer un polideportivo
para Villajovita y el colegio para crear un local social”,
dijo Ros. “Además, esos chiquillos molestan a los vecinos
cuando salen de clase, llamando a los interfonos e
insultando a las personas”, añadió. Si esto no fuera
posible, apelan por conseguir que uno de los rellanos de las
murallas Meriníes se adecentara en beneficio de una zona de
juego o parque infantil. Se pretende resucitar al equipo de
fútbol de Villajovita y dar a los pequeños una ocupación
para sacarlos de la calle y, sobre todo, de la calzada.
En cuanto a la reordenación del tráfico, pretenden cambiar
el sentido de la calle Calderón de la Barca, ya que los
vehículos alcanzan mucha velocidad. Como medida preventiva,
exigirán que haya pasos de cebra con badenes.
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