La puerta de San Pedro de la Santa Iglesia Catedral de Ceuta
vivió en la mañana de ayer la tradicional bendición de
animales conmemorativa de las fiestas patronales. El
encargado de oficiar esta ceremonia en esta ocasión fue el
Deán de la Catedral, José Manuel González Jiménez. Numeroso
público se congregó y cerca de 50 mascotas fueron
bendecidas.
Cual dejad que vuestras mascotas se acerquen a mí, ayer el
Deán de la Santa Iglesia Catedral, José Manuel González
Jiménez, ofició la tradicional bendición de animales en
honor a San Daniel. Un año más la población ceutí se volcó
con esta cita donde los verdaderos protagonistas son los
animales. Casi cincuenta mascotas recibieron el agua bendita
de un improvisado hisopo en forma de clavel.
El Deán de la Santa Iglesia Catedral explicó que la
bendición simboliza el sentido de la unión franciscana con
la naturaleza. Franciscano por San Daniel, que lo era, y por
el que estos días se celebran las fiestas patronales de
Ceuta. “Una acción fundamental como es bendecir un elemento
esencial de la naturaleza en las vivencias del ser humano
como son los animales de compañía”, apuntó.
La impaciencia de los dueños de las mascotas propició que la
ceremonia de bendición comenzara mucho antes de lo previsto.
Uno a uno, amo y animal fueron pasando frente al cura que
esparció gotas de ventura y protección.
No hubo sorpresas este año. Gatos y sobre todo perros fueron
las especies más repetidas. También hubo hámsters y hasta
algún conejo. Los dueños iban desde adultos a ancianos y
como no, también pequeños, que acompañaban a sus mascotas.
Junto al Deán, la Hermana Mayor de la Cofradía de San Daniel
y Compañeros Mártires, María del Carmen Sánchez Castillo.
Para algunos era la primera vez que venían: “Me ha hecho
mucha ilusión, por mí y por mi mascota. Ahora siento que
está más segura”, mientras que otros eran auténticos
veteranos: “Este es el quinto año que traigo a mi perro, no
me lo pierdo nunca”.
La nota curiosa la puso la Asociación Protectora de
Animales, que llevó a la bendición a algunos de sus
ejemplares esperando también que alguien quisiera adoptarlo.
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