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Atrás van quedando en el olvido de
las hemerotecas plazos y más plazos de supuestas
finalizaciones o de aperturas de la nueva instalación
hospitalaria que se construye en Loma Colmenar. Ahora, en
una nueva visita de la ‘jerifaltia’ del Ingesa, se informa
de que será a finales de 2009 cuando el clínico esté
operativo al completo.
Quien así lo ha afirmado ha sido Susana Pupato, directora
general del Instituto de Gestión Sanitaria a la que
señalamos como última ‘vaticinadora’. Antes que ella,
durante la primera visita de Chacón, el responsable
facultativo de las obras, Luis Fernández, indicó que el
hospital concluiría sus obras en el primer semestre de 2009.
Antes que ellos, que son los más recientes, el actual
misnistro de Sanidad, Bernat Soria indicó que el hospital de
Loma Colmenar estaría operativo cuando acabaran sus obras en
julio de 2008. Jerónimo Nieto, ex delegado del Gobierno
afirmó en su momento que el equipamiento estaría operativo
en verano de 2008. La ex ministra del ramo, predecesora de
Soria, vaticinó que acabaría a primeros de 2008, mientras
que el director provincial del Ingesa en Ceuta, Jesús Lopera
afirmó en febrero de 2008 que las consultas externas
abrirían en mayo de este año y el resto del equipamiento lo
haría a lo largo de este pasado verano.
Lo cierto es que Susana Pupato, ante este alarde de
predicciones fracasadas y para cubrirse un tanto las
espaldas -antes también lo hicieron otros- apuntó lo de
aquello de “si todo va según lo previsto”. Claro que hasta
la fecha lo ‘previsto’ es que se sigan retrasando los planes
de apertura de esta necesaria instalación.
En cualquier caso, aunque a ‘trompicones’, la estructura
exterior cobró forma en un tiempo razonable y la interior
avanza con cierto ritmo regular ahora.
En los Presupuestos Generales del Estado para Ceuta figuran
los últimos 12 millones de la partida plurianual para la
construcción de este equipamiento, lo cual,
evidentementemente en función de los antecedentes, no es
garantía de que en este próximo 2009 esté conclusa la obra
del hospital. Ojalá que si.
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OPINIÓN / EDITORIAL
