En un acto con tintes surrealistas donde había más efectivos
de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que
manifestantes, algo no demasiado difícil dado que hasta
media hora después del inicio de la concentración allí sólo
estaba su convocante, Abdelkrim Jaber, presidente de la
Asociación de Amistad Hispano-Marroquí, que pidió a
Zapatero, Juan Carlos I y Mohamed VI más ayuda para la
entidad.
Ocho años “de olvido” después de su fundación y tras sufrir
muchos pesares por llevar la bandera española a cuestas, el
presidente de la Asociación de Amistad Hispano-Marroquí,
Abdelkrim Jaber, se concentró ayer a partir del mediodía
ante la Delegación del Gobierno con las enseñas de ambos
países y una foto de Zapatero para pedir al presidente del
Ejecutivo nacional y a los monarcas de los dos Estados más
atención y ayuda para la labor que realiza la entidad,
fundamentalmente educativa, según subrayó.
Jaber, al que a las 12.30 horas aún no acompañaba nadie más
que, discretamente, varios agentes de seguridad, leyó sendos
comunicados dirigidos a las autoridades de los dos países y
rehusó a preguntas de los periodistas entrar en ningún tipo
de polémica política sobre Marruecos y las ciudades de Ceuta
y Melilla.
|