Los sindicatos en la Policía Nacional escenificaron ayer su
protesta desempolvando los viejos uniformes del cuerpo con
los que vistieron a tres maniquíes sin cabeza y de los que
colgaron carteles con sus reivindicaciones. La manifestación
contó con más de medio centenar de delegados sindicales
armados con silbatos ante la Delegación del Gobierno.
Algo más de medio centenar de delegados sindicales en el
Cuerpo Nacional de Policía realizaron ayer la concentración
semanal ante la Delegación del Gobierno.
En esta ocasión, los sindicalistas desempolvaron dos viejos
uniformes del Cuerpo para hacer llegar de una forma más
sardónica sus reivindicaciones salariales que les equiparen
al resto de las policías autonómicas y locales.
Así, los manifestantes vistieron a tres maniquíes sin cabeza
con dos uniformes de la Policía Nacional de finales de la
década de los setenta, de los cuales colgaron sendos
carteles con los lemas Cobro menos que cuando se vestía así
y Yo también estaba mejor. Igualmente, uno de los muñecos lo
ataviaron con un uniforme del Cuerpo de la Guardia Civil con
un cartel que decía Yo no hablo porque no me dejan.
Los representantes de los trabajadores en la Policía
Nacional quisieron recordar que, lejos de cejar en su
empeño, intensificarán las medidas de protesta para lograr
la equiparación salarial con los distintas cuerpos de
seguridad autonómicos y locales.
Desde hace tres semanas, las concentraciones ante las
distintas delegaciones del Gobierno en el país son
semanales. Asimismo, el pasado día 2 los sindicatos
mostraron su malestar no asistiendo al Día de la Policía
Nacional.
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