Siete días después de ofrecer su peor versión en Antequera,
la AD Ceuta regresa al Alfonso Murube con el propósito de
repetir el partido disputado ante el Granada en su última
actuación en tierras caballas. Un duelo en el que los
blancos vencieron y convencieron a uno de los favoritos
para, 96 horas después, sucumbir ante un recién ascendido
como los antequeranos. Por lo que la premisa no es otra que
alcanzar un equilibrio en el que, como ya dijeron los
filósofos griegos, se encuentra la virtud. Una estabilidad
que, como sucede en el mundo del fútbol, llegaría en forma
de triunfo. Lo que además evitaría que los blancos se
descolgaran de los puestos de playoff de ascenso.
Con esta idea, Benigno Sánchez apostará por el equipo que
venciara a los granadinos, volviendo a contar con Sergio
Castaño en el doble pivote, manteniendo a Alberto en el
centro de la zaga junto a Dani Martino. Una vez que Lledó y
De Lerma, que se marcharon de El Maulí con molestias, se
hayan recuperado de sus respectivas lesiones, sumándose a
los disponibles un Javi Navarro que no se desplazó a tierras
malagueñas por un golpe en el empeine. Por lo que las únicas
ausencias que tendrán los blancos serán la de Anxo, a quien
no se le quiere forzar, y Ángel Moreno, todavía de baja
federativa. Mimbres suficientes para recibir con optimismo a
un Betis B situado en la quinta plaza de la tabla y que
supera a los ceutíes en dos puntos y un puesto.
Por su parte el filial verdiblanco arriba en tierras ceutíes
con el propósito de mantenerse en la zona alta de la tabla,
gracias al pleno de triunfos conseguido en su feudo.
Resultados que no han sido tan positivos lejos de Sevilla,
al caer en su visita al Granada 74 (2-1) y Melilla (2-0),
venciendo de forma contundente al Conquense (1-4) en La
Fuensanta.
Una de las claves del éxito de los hispalenses está en haber
confiado en el bloque que la pasada campaña logró la
permanencia, y que un año antes ascendió a Segunda División
´B´. Un vestuario joven pero a su vez experimentado,
dirigido por el catalán José María Nogués, quien la campaña
pasada se proclamara campeón del grupo cuarto con el Écija.
Quien tendrá la única baja de Eloy por lesión, pero que
recupera a Carreño, su máximo goleador y referente ofensivo
de los verdiblancos.
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