El jurado de la décima edición del Premio Fundación
Convivencia de la Ciudad Autónoma de Ceuta comunicó su falló
ayer a las 19.50 horas en el Palacio Autonómico. El galardón
se concedió a la Fundación Miguel Gil Moreno por su
contribución humanitario en zonas devastadas por la guerra y
su apoyo a las familias de los corresponsales desplazados a
regiones en conflicto. El premio fue concedido por
unanimidad y el jurado quiso hacer una mención
extraordinaria a la Plataforma de Mujeres Artistas Contra la
Violencia de Género por su labor desarrollada para favorecer
la igualdad y destacó la importancia adquirida del premio.
Miguel Gil Moreno fue camarógrafo y corresponsal de guerra
en numerosos conflictos. Estuvo en Bosnia, Kosovo, Congo,
Liberia, Ruanda, Sudán, Chechenia y Sierra Leona. El 24 de
mayo de 2000 una emboscada guerrillera segó su vida. La
miembro del jurado que anunció el fallo de este año, la
directora ejecutiva de la Fundación EFE, Paloma Rupérez
Rubio; destacó la labor en pos de “la libertad de
información y de lograr sociedades más libres, así como la
amplia labor humanitaria” desarrollada por la Fundación
Miguel Gil Moreno.
La entidad es una fundación sin ánimo de lucro que nació en
2002 para dar continuidad al espíritu humanitario de Miguel
Gil. La fundación asiste a las viudas y huérfanos de los
periodistas de guerra independientes y colabora en los
países afectados por un conflicto centrada en los países
africanos de Costa de Marfil y Sierra Leona. En este sentido
la entidad financió la ampliación de una escuela para la
formación de las campesinas en la aldea de M´Batto Bouaké en
Costa de Marfil o colaboró en la reconstrucción del Hopital
de Freetown de los hermanos de San Juan de Dios enviando
material sanitario, escolar o deportivo, entre muchas otras
acciones. Además la fundación otorga cada año el Premio
Miguel Gil Moreno de Periodismo, dotado con 6.000 euros, a
corresponsales de guerra que destacan por su entrega
profesional en áreas en conflicto. El galardón nació después
de que los compañeros de Miguel Gil se unieran tras su
muerte para escribir el libro Los ojos de la guerra, en el
que escribieron más de 70 reporteros de guerra.
La decisión del jurado fue unánime. La consejera de
Educación, Cultura y Mujer, Mabel Deu, bromeó con el anuncio
del premio a la entidad: “Hemos llamado por teléfono y ha
saltado un contestador, supongo que mañana recibiremos
noticias de ellos”. Por unanimidad también fue la concesión
de la mención especial a la Plataforma de Mujeres Artistas
Contra la Violencia de Género “por su labor y esfuerzo en
fomentar la igualdad”.
Paloma Rupérez quiso remarcar igualmente la relevancia que
está adquiriendo el Premio de la Fundación Convivencia: “El
galardón tiene una magnífica imagen y supone un empuje a una
acción poco reconocida como es el trabajo por la
convivencia”.
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Barenboim recibió el último galardón
El honrado en la novena edición
del Premio de la Fundación Convivencia de la Ciudad Autónoma
de Ceuta fue el director de orquesta Daniel Barenboim que
recogió el galardón el pasado 18 de julio. El argentino
destacó en la recepción del premio, en el que estuvo
escoltado por Juan Vivas y la consejera Mabel Deu, que “la
idea de la convivencia en Ceuta se practica de forma
diferente al resto del mundo”. El director de la Orquesta
Sinfónica de Chicago y de la Deutsche Staatsoper, que rompió
el veto existente al compositor alemán Wagner en Israel, es
la única persona en el mundo que posee el pasaporte israelí
y palestino y remarcó en su discurso las cuatro culturas que
conviven en paz en la ciudad lo que le otorga “un signo
único en el mundo”. Mabel Deu reivindicó la lucha de
Barenboim de quien dijo que “ha sabido volcar su enorme
prestigio como pianista y director de orquesta, en una lucha
incansable a favor de la paz y de la reconciliación entre
palestinos e israelíes”.
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