La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) cerrará
el paso a los accesos de los pantanos del Renegado y el
Infierno por los desprendimientos ocasionados durante las
lluvias. La CHG solicitará al Ministerio de Medio Ambiente,
Medio Rural y Marino que se cubra el presupuesto con una
obra de urgencia para arreglar los desprendimientos de
tierra y la caída de árboles.
El privilegiado entorno del pantano es utilizado por muchos
ceutíes para hacer deporte o pasear en la naturaleza. La
Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y la
Ciudad Autónoma comunicaron ayer que los caminos y vías que
circundan por el pantano del Renegado y del Infierno,
situados en los montes de García Aldave, estarán cerrados al
público.
“Queremos situar una valla alta justo a la entrada con un
letrero que ya se está haciendo donde se advierta del
peligro de desprendimiento” indicó ayer el delegado de la
CHG, Salvador Durá.
Durante las pasadas lluvias en las vías de acceso a los
pantanos se produjeron corrimientos de tierra y
desprendimientos de taludes y no se descarta que en los
próximos días continúen los problemas por lo que el riesgo
de transitar esos caminos es bastante elevado: “Todavía se
puede ver como caen algunas de las rocas, en la evaluación
de los daños vimos cómo se desprendía una que debía superar
los 500 kilos, está claro que lo primero que se debe hacer
en la zona es evitar un accidente” aseguró Durá.
Además de los desprendimientos se produjo la rotura de uno
de los puentes del Renegado, las cunetas de los caminos
quedaron completamente destrozadas y cayeron entre 50 y 60
árboles en una de las cuestas de ese pantano. La
Confederación está realizando el informe de los daños
sufridos y elaborando un presupuesto de emergencia que será
remitido a la jefatura de la CHG y posteriormente al
Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino donde
deberá ser aprobado. La Ciudad también colabora en esa zona
con el Parque Móvil, un departamento que es dependiente de
la Consejería de Presidencia.
La CHG aportó el pasado miércoles la cantidad total de
lluvias que se acumularon en la ciudad durante los tres días
de fuertes tormentas. El global alcanzó los 533 litros por
metro cuadrado, lo que supone más de dos tercios de las
previsión de precipitaciones anuales de Ceuta.
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