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El Gobierno de Melilla tiene previsto retirar de la vía
pública una estatua de Francisco Franco, ubicada bajo el
recinto amurallado de Melilla La Vieja, para cederla al
Museo Militar de la ciudad si éste lo estima conveniente
para su instalación allí.
Así lo anunció ayer el portavoz de la Ciudad Autónoma,
Daniel Conesa, en respuesta a una pregunta de CPM durante el
pleno de control al Gobierno, formulada por el diputado
Abdelhamid Mohamed.
Según explicó Conesa, la retirada de la estatua tendrá lugar
cuando comience la obra de rehabilitación de la muralla de
Melilla La Vieja que hay justo detrás de la efigie,
cumpliendo así lo establecido en la Ley de Memoria Histórica
sobre la retirada de los monumentos y símbolos franquistas.
Conesa puntualizó no obstante que la escultura de Franco “no
la puso este Gobierno, la puso otro, y otros pudieron
quitarla pero no lo hicieron”, en respuesta a los reproches
de Mohamed, que ayer recordó que Melilla “es una de las dos
ciudades españolas que aún mantienen estatuas del caudillo”.
El monumento de Francisco Franco ha suscitado varias
polémicas en la ciudad autónoma a lo largo de los últimos
años, la última en noviembre de 2005, cuando el Gobierno
local retiró la estatua de su lugar habitual para realizar
unas obras de saneamiento, aunque siete días después volvió
a ser colocada en otra ubicación cercana. A la escultura le
acompañan tres placas, una con un escudo franquista, otra
con un escudo de la ciudad y otra con la inscripción “Al
Comandante de la Legión D. Francisco Franco Bahamonte
1921-1977”.
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