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Los dos sindicatos de clase, la Unión General de
Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO) de Ceuta,
juntaron ayer fuerzas para hacer llegar al Gobierno de la
Ciudad Autónoma toda una ‘declaración de guerra’, con la que
esperan conseguir hacer cumplir el acuerdo a nivel nacional
y local que existe sobre los aumentos retributivos de los
trabajadores de la Administración, los cuales, a día de hoy,
el Ejecutivo no tiene intención de abonar al completo por
ser ilegal, a juicio del Ministerio de Administraciones
Públicas (MAP) y la Intervención de Fondos. “No vamos a
ceder ni un solo milímetro”, aseguró, por ejemplo, Juan Luis
Aróstegui.
La rueda de prensa de los secretarios generales en Ceuta de
UGT y CCOO, Antonio Gil y Juan Luis Aróstegui, y sus
respectivos números uno en las secciones sindicales del
Ayuntamiento, José Mata y Gonzalo Barredo, arropados por una
veintena de delegados, quiso escenificar ayer la importancia
que para los sindicatos tiene lo que se trató: el supuesto
incumplimiento de su razón de ser, de la negociación
colectiva.
Por ello no dudaron en anunciar un calendario de
movilizaciones que desembocaría en una huelga en la
Administración local como última medida de presión, pasando
por la “utilización de mucha información que tiene que ver
con el despilfarro y determinadas políticas irregulares de
la Ciudad”, en palabras de Gil.
El conflicto radica en cerca de un millón y medio de euros
de incrementos retributivos o adeudados a los funcionarios y
al personal laboral –el complemento específico de las pagas
extraordinarias y los fondos adicionales– que el Gobierno de
la Ciudad Autónoma se comprometió a abonar durante 2008,
pero que la Intervención de Fondos y el Ministerio de
Administraciones Públicas han declarado ilegales por superar
el límite infranqueable del uno por ciento de la masa
salarial.
“Estamos ante un problema de principios”, declaró Aróstegui,
“creemos que bajo ningún concepto se puede eludir la
responsabilidad de cumplir con lo pactado; es la piedra
angular sobre la que se edifica toda la negociación
colectiva, la lucha sindical y las posibilidades de avance y
mejora de los trabajadores”.
“Si aquello que se pacta y se firma se puede incumplir
impúnemente”, advirtió el secretario general de CCOO, “se
habrá abierto una brecha casi definitiva en la posibilidad
de que los trabajadores defiendan sus derechos”.
Aróstegui manifestó que tanto su sindicato como UGT
“responderemos con toda contundencia, sin ambigüedades y con
todos los medios a nuestro alcance”.
“Todos los empleados de España, sin excepción, incluida
Melilla”, reveló el dirigente de CCOO, “van a disfrutar de
ese incremento retributivo”, que, recordó, “está pactado a
nivel nacional”.
Aróstegui quiso desmontar el “triste argumento” del
incumplimiento de la Ley, ya que, según manifestó, los
informes de los gabinetes jurídicos de ambas centrales
sindicales “avalan la legalidad de este acuerdo”.
“Es un sarcasmo también”, indicó el secretario general de
CCOO, “que el Gobierno alegue austeridad y crisis para no
cumplir sus compromisos, porque es público y notorio que
despilfarra un volumen impresionante de fondos públicos para
el que no hay que aplicar el principio de austeridad que sí
quiere aplicar a sus trabajadores”.
A este respecto, Aróstegui aseguró que “disponemos de una
serie interminable de facturas que sonrojarían a cualquiera
y que quizá hoy todavía no sea el día de mostrarlas, pero
que saldrán a la luz pública para desmontar el falaz
argumento de la austeridad”.
“Creemos que hay razones más que suficientes para que los
trabajadores del Ayuntamiento secunden las movilizaciones”,
solicitó el secretario general comisionista, que citó entre
las medidas de presión las concentraciones o recogidas de
firmas, entre otras, “para desembocar, sin duda, en una
huelga si el Gobierno sigue pretendiendo castigar a los
trabajadores y no cumplir sus compromisos, que es lo mínimo
que hace una institución decente”.
Por su parte, el secretario general de UGT tuvo un discurso
similar: “El Gobierno tiene todo meditado y quiere castigar
a los empleados del Ayuntamiento para hacerles partícipes de
su mala gestión”.
“No vamos a permitir que esto suceda”, aseguró Gil, quien
indicó que “el Gobierno viene incumpliendo sistemáticamente
sus acuerdos, pero este es el más descarado”.
expreso Gil expresó que esta lucha sindical va a ser “muy
contundente” y destacó que, además de las medidas de
presión, “sobretodo vamos a utilizar mucha información que
tiene que ver con el despilfarro y determinadas políticas
que se están llevando a cabo en el Gobierno”.
Por último, el secretario de Administración Autonómica y
Local de la Federación de Servicios Públicos (FSP) de UGT,
José Mata, también intervino para calificar al Gobierno de
Vivas de “hipócrita” por no cumplir con lo que dice el
informe del MAP sobre las contrataciones a través del INEM.
“Esta Administración tiene un problema económico y quiere
sacarlo adelante con el dinero de los trabajadores”,
resumió.
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