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El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, mostró ayer
su repulsa a los hechos acaecidos en la tarde del pasado
jueves cuando un grupo de marroquíes increpó e insultó a los
jefes de la Guardia Civil y de la Policía que, además, iban
acompañados del delegado de Hacienda en la ciudad autónoma.
"Me parece totalmente deleznable y creo que es una
acción bochornosa que unos individuos, aprovechándose de
momentos pacíficos de trabajo, vayan en grupo a coaccionar y
a agredir a las autoridades cuando están en otro país". Así
de contundente se mostró el presidente de la Ciudad, Juan
José Imbroda, cuando, a preguntas de los periodistas, valoró
los hechos ocurridos en la tarde del pasado jueves cuando,
supuestamente, un grupo de marroquíes acorralaron e
increparon a los jefes de la Guardia Civil y la Policía de
Melilla, así como al delegado de Hacienda en la ciudad
autónoma.
Por ello, el jefe del Ejecutivo local dejó claro que "ya es
hora de que cesen esas formas de reclamar que tienen",
haciendo especial hincapié en que Marruecos "no tiene nada
que ver con todo esto, sé que son movimientos incontrolados
de algunos que ya se pasan de castaño oscuro".
Es más, Imbroda consideró que las autoridades marroquíes
"actuaron debidamente protegiendo a las autoridades
españolas que estaban en Marruecos". Eso sí, aseveró el
presidente del Gobierno autonómico que espera que la acción
de la policía marroquí "sea más contundente para que esto no
vuelva a pasar en el futuro".
Asimismo, señaló, al hilo de lo ocurrido hace dos días en
Beni Enzar, que la vigilancia fronteriza debería
"flexibilizarse al máximo pero sin perder lo que es el
propio control", destacando que, para ello, hacen falta "más
medios humanos, de tal manera que los funcionarios de los
puestos fronterizos no estén tan sobrecargados".
Por su parte, el delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, se
remitió ayer a la nota de prensa enviada en la noche del
pasado jueves por la institución que dirige. Sin embargo,
anunció que "se ha informado a las autoridades consulares de
lo ocurrido para que desarrollen la información prevista en
estos casos".
En este sentido, cabe recordar que la nota remitida por
Delegación explicaba que en la tarde del jueves se llevó a
cabo una reunión en las instalaciones marroquíes de la
frontera de Beni-Enzar -de las que se producen con cierta
periodicidad entre los responsables aduaneros y policiales
de ambos lados de la frontera, en la que participaban mandos
de la Guardia Civil, del Cuerpo Nacional de Policía y de la
Agencia Tributaria de Melilla-, y que, una vez concluido el
encuentro, cuando los funcionarios españoles regresaban a
las instalaciones fronterizas de nuestro país, "empezaron a
ser acosados e insultados por un grupo de individuos".
Los Grupos con representación en la Asamblea de la Ciudad
también valoraron ayer los hechos ocurridos hace dos días en
las inmediaciones de la Frontera de Beni Enzar.
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El País subraya que el “principal blanco” fue Goya
El País se hizo ayer eco, en su
versión digital, de lo ocurrido el pasado jueves en Beni
Enzar. De hecho, el Diario pone nombres y apellidos a los
actores de la información. "El teniente coronel, Ambrosio
Martín, el comisario José Manuel Calleja y el delegado de
Hacienda Jesús Ignacio Pérez, acudieron a un reunión
rutinaria con sus homólogos marroquíes en Beni Enzar".
Cuando, a última hora de la tarde, regresaban a pie a
Melilla, fueron "increpados y achuchados" por un par de
ciudadanos marroquíes y uno de ellos llegó a golpear al
inspector-jefe Goya, según relata un testigo presencial.
Según El País, "el principal blanco del grupo marroquí fue
Goya, al que consideran responsable de las restricciones
impuestas a su entrada en Melilla".
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