Han visto ayer por la noche, en el
Canal Cuatro de Televisión, el reportaje de Jon Sistiaga…?.
¿Ah no?; ¡pues consíganlo!. Al extremista Laarbi Maateis y a
su célula no hace falta presentarlo: ya lo hace el solo.
Reparemos, por el momento, solo en un detalle: ¿por qué el
líder en Ceuta del oscurantista movimiento “Tabligh”, sidi
Maateis, se tomó tanto interés en que no le filmaran en la
mezquita de la secta, la Masjid-alnoor…?: ¿acaso tendría
algo que ocultar?. También de paso -¡ah jai, chof!, ¿no
crees?- podría sidi Maateis explicar, en esas curiosas
entrevistas que selectivamente concede, por qué el pasado
viernes 19 le expulsaron, a él y a sus conmilitones, de la
mezquita Muley El Mehdi; incluso podría posicionarse (¡ah
jai, chof!, ¿o acaso estás en el ajo?) contra las presiones
y amenazas veladas que está recibiendo el venerable y
respetado imám (un solidario abrazo, Liazid) de la mezquita
“Sidi Embarek”, sin duda el religioso e intelectual qué más
conocimientos tiene, en Ceuta y buena parte de las vecinas
ciudades de Tetuán y Tánger, sobre el Islam y que le da
sopas con ondas a un fanático ignorante como el citado
radical y fundamentalista líder ceutí del Tabligh. ¡Ah jai,
chof!, ¿acaso no es así?.
¿Leyeron al final el artículo del profesor Reinares, que les
comentaba ayer..? (Publicado en el diario El País el pasado
18 de septiembre). ¿Ah no?; ¡pues búsquenlo. Su autor
menciona determinados ambientes de Barcelona o el Reino
Unido (y por qué no en Ceuta también), “Ambientes en los que
se desenvuelven además movimientos islamistas de orientación
rigorista y excluyente, sólidamente establecidos en Pakistán
e introducidos en la diáspora pakistaní, a menudo hostiles a
la integración de los inmigrantes de su mismo credo y cuando
menos ambivalentes en relación con el terrorismo denominado
‘yihadista’. Ambientes, en suma, que favorecen las
condiciones en las que se producen procesos de
radicalización violenta y la creación de células extremistas
locales que pueden proporcionar cobertura a terroristas
procedentes del exterior” (repase el lector la última
parrafada). Por cierto, lo que seguramente por problemas de
espacio no cita el profesor Reinares son las conexiones
Barcelona-Ceuta (mezquitas de El Raval y Masjid-alnoor) y
viceversa, como ya les había adelantado hace tiempo en esta
columna; verán, de los 14 detenidos en Barcelona al menos
tres procedían de el CETI, siendo posteriormente repescados
por la fraternal secta de sidi Laarbi Maateis, mientras que
al menos otros tantos eran turistas asiduos (de esa “agencia
de viajes” tan peculiar y económica de la que también les
escribí hace ya tiempo) de la pensión (sin papeles) sita en
la mezquita “Tabligh” de Ceuta, Masjid-alnoor (literalmente
“Mezquita de la Luz”, tiene huevos el nombre). A ver como
explica estas cosas, entre otros a su protector y preboste
de la Ciudad, este extremista personaje local, virtual conde
de Mollina y duque de Kandahar. ¡Ah jai, chof, adelante con
los faroles!.
Las fichas van encajando... ¿A qué espera la asociación
“Luna Blanca” para impulsar, entre los musulmanes moderados
de Ceuta, una “Musal-la” alternativa en los terrenos de su
propiedad, ajena al juego de la minoría fanática y
extremista de la secta Tabligh local.
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