El Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios ofreció
ayer en el Parque de Bomberos una copa de despedida al
veterano Antonio Amores, quien se jubila tras más de 30 años
en el Cuerpo. Al acto asistió Juan Vivas, presidente del
Gobierno de la Ciudad Autónoma, quien honró al trabajador,
de quien dijo que “puede estar satisfecho, porque tiene una
hoja de servicios intachable”.
Tras 31 años en el Servicio de Salvamento y Extinción de
Incendios de Ceuta –entró a formar parte de ello en 1977–,
el algecireño Antonio Amores, quien se considera –y le
consideran– “un caballa más”, arribó a la ciudad autónoma en
1967. De todos estos años recuerda, lógicamente, cómo ha ido
evolucionando el material con el que combaten el fuego.
“Antes, esto no lo había”, dice señalando los modernos
camiones estacionados en el Parque de Bomberos.
Pese a que reconoce que a lo largo de todos estos años
“hemos pasado mucha fatiga”, lo califica como “muy bonitos”.
Su situación más difícil y dura como bombero, recuerda, fue
cuando sacó a una persona del incendio en la sala de
máquinas de un barco mercante. “Fue una pena que luego el
marinero falleciera”, lamenta Amores, quien ha llegado a ser
cabo dentro del Cuerpo.
Por su parte, el jefe del Servicio de Extinción de Incendios
de Ceuta, Manuel Gentil, manifestó públicamente que Antonio
Amores “no se va a despedir nunca de este Cuerpo” y recordó
que llegó a la ciudad autónoma procedente de un servicio de
buceo en Algeciras. De hecho, “él es el que ha sacado la
mayoría de las anforas y anclas que hoy lucen en los museos
de la ciudad”.
Amores, quien fue campeón de España y del Mundo de pesca
submarina, “me propuso hacer aquí la Unidad de Rescate
Acuático”, evocó el jefe de los bomberos ceutíes.
Gentil aprovechó la presencia de Juan Vivas para solicitar
sin acritud más personal para su Servicio: “Cada día se
jubilan más y el personal nos escasea, por lo que le pido a
ver si el Gobierno puede hacer un esfuerzo”.
“Que Antonio sea muy feliz”, concluyó el jefe del Servicio
de Extinción de Incencios en su alocución.
El presidente del Gobierno de la Ciudad Autónoma, por su
parte, recordó que fue vecino del homenajeado en el polígono
de África, donde “establecimos una relación inolvidable”.
“Era una buena persona y un buen padre de familia”, dijo
Vivas, que le indicó que puede estar “satisfecho” de una
hoja de servicios de treinta años “intachable”.
“Muchas veces te has jugado la vida”, declaró el presidente
de la Ciudad Autónoma, quien procedió a imponerle el escudo
de Ceuta y hacerle entrega de una placa y el obsequio de un
reloj.
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